El Ayuntamiento de El Burgo de Osma busca una solución a la falta de actividad en la fábrica de Airtificial (antigua Carbures) y al incumplimiento por parte de la empresa del acuerdo por el que se comprometía a invertir diez millones de euros y a crear 95 puestos de trabajo a cambio de la cesión y ampliación de una nave municipal. Así lo confirma el alcalde, Miguel Cobo, quien recuerda que en el pleno del 2 de marzo de 2020 se dio a conocer el expediente y el equipo de Gobierno mostró su malestar por los incumplimientos de la firma.
En aquel pleno, en el que el alcalde hizo una serie de declaraciones sobre la situación laboral de la empresa (despido de empleados) y la falta de actividad, el portavoz de la PPSO, Antonio Pardo, se ofreció para mediar con Carbures. «Pero nadie ha dicho nada ni nadie ha movido ficha. La empresa sigue sin nigún tipo de actividad desde marzo», denuncia Miguel Cobo, quien espera poder reunirse en breve con los representantes de la firma para conocer la situación y los planes en El Burgo.
«Como surgió la alarma con la pandemia, le hemos ido dando preferencia a otras situaciones», pero es un tema que urge al equipo de Gobierno. La empresa lleva cerrada desde el 14 de marzo y «los tres o cuatro trabajadores que quedaban están todos en ERTE», pero recientemente se observaron movimientos en la propia nave, cedida por el Ayuntamiento, concretamente de descarga de maquinaria de alto tonelaje. Así que desde el Ayuntamiento se ha vuelto a reclamar información a Airtificial.
respeto. «De todos modos, el procedimiento va a ser el mismo, porque hay una falta de cumplimiento de relación contractual con El Burgo de Osma», apunta el alcalde, quien indica que ha habido dos expedientes abiertos para esta empresa en 2012 (para la cesión de la nave) y en 2018 (para la ampliación de las instalaciones) y «en ninguno de los dos se ha cumplido el objetivo planteado». Entiende que la situación ahora con la pandemia es difícil para el sector empresarial, pero que al Ayuntamiento le corresponden pedir explicaciones, sobre todo, «por respeto y por no tener un trato discriminatorio hacia otras industrias locales». Hay que recordar que se cede a la empresa el uso de una planta de más de 4.000 metros cuadrados, en la que podría estar interesado otro negocio de la localidad o que pudiera llegar de fuera.
Una de las opciones será la reversión del contrato con la firma Carbures, pero el primer paso será contactar con la empresa para conocer sus planes e intentar «sujetar» a esta empresa en el polígono La Güera.