Sinopsis oficial
Sergio viaja a Utrecht con su familia para asistir a un partido de fútbol. Antes de coger el vuelo de regreso a Barcelona, sufre un ataque de pánico y decide quedarse en Holanda. Incapaz de dar una explicación lógica a los suyos, corta el contacto con su pasado. A partir de ese momento, tendrá que sobrevivir sin dinero, sin amigos, sin casa y sin hablar el idioma, hasta que sea capaz de encontrarse a sí mismo.
La crítica -
Por Juana Samanes
Si tuviéramos que explicar rápido este drama de contenido social diríamos que es el reverso de lo que nos muestran programas televisivos como Españoles por el Mundo o Madrileños por el mundo, porque de forma realista acerca la dificultad de cualquier emigrante por afianzarse en otro país debido a los recelos y la xenofobia. Está basada en la propia experiencia personal del director, Gerard Oms, que viajó a Holanda en 2008 en busca de una oportunidad laboral debido a la crisis económica que vivía España en ese año. Mario Casas ganó la Biznaga de plata a Mejor actor (ex aequo) por su trabajo y la película también consiguió la Biznaga de Plata de la Crítica.
Sergio viaja a Utrecht con su familia para asistir a un partido de fútbol en el que participa su equipo. Pero, de pronto, antes de coger el avión de regreso a su hogar, Barcelona, entra en un bucle y decide quedarse en Holanda, sin dar explicaciones a sus seres queridos ni tener demasiado claro la razón por la que lo hace. Sin hablar el idioma, sin amigos, sin dinero y sin lugar donde alojarse descubrirá que los extranjeros, aunque sean europeos como él, no lo tienen fácil.
Dice el refranero español, tan certero siempre, que "Nadie es profeta en su tierra", pero este amargo drama también deja claro que todavía es peor en el extranjero para muchos emigrantes que deciden buscar una oportunidad, lo que ocurre es que pocos (y menos ante una cámara de televisión) quieren contar sus malas experiencias.
Si Mario Casas resulta muy veraz como Sergio, un joven perdido que busca su identidad alejado de los suyos, realmente los personajes que explican perfectamente la situación de los emigrantes en otro país son la cariñosa casera de Sergio, interpretada por la actriz negra Jetty Mathurin, quien le deja claro que aunque aprenda holandés siempre será un extraño en esa tierra y el siempre convincente David Verdaguer, que encarna al amigo pícaro y cenizo que Sergio encuentra en Utrech y que, con sus "chanchullos", es todo un superviviente pero que no se engaña y tiene claro que en Holanda ser español no supone ser bien aceptado.
De ritmo lento, quizás el toque de ideología de género es un recurso algo simple para explicar la crisis vital que anida en el protagonista.