Las empresas de la provincia no escapan a las crisis que está sufriendo la economía mundial. La escasez de materias primas y los problemas que sufre la logística internacional condicionan la productividad de los negocios en la provincia que escapan mayoritariamente, no obstante, a los efectos del Brexit.
La mitad de las empresas de la provincia se ve condicionada por la falta de materias primas. De este porcentaje, el 58,3% está "muy afectado" y, a consecuencia de esta crisis, sufre encarecimiento de productos (el 52,9%), se ve forzado a extremar la búsqueda de nuevos canales de suministro (32,4%) y, en el peor de los casos, cae en la imposibilidad de producir (14,7%).
La escasez de semiconductores ha ralentizado la fabricación de coches y las empresas de automoción de la provincia padecen la disminución de pedidos por parte de las empresas automovilística.
A esto se suman las tensiones alcistas del precio del aluminio, acero, cobre o del hierro, que en septiembre registraron máximos en su precio afectando sobremanera al sector de la Construcción y a todas las auxiliares que trabajan para él.