La soriana Marta Pérez es desde este jueves la nueva plusmarquista española de los 1.500 metros tras correr la distancia en 3:57.75 este jueves en la semifinal de los Juegos Olímpicos de París. Pérez destroza así un récord que tenía Natalia Rodríguez desde hace casi 20 años (3:59.51) rebajándolo en casi dos segundos.
Un récord de España que supone a su vez rebajar en casi 3 segundos su marca personal, pero que a la vez tiene el sabor agridulce de que no le valió a la soriana para clasificarse para la final olímpica de este viernes en la semifinal más dura de la historia de los Juegos, en la que hubo que bajar de 3:57 para poder clasificarse.
Una carrera de auténtica locura que tiene su explicación en la apuesta desde el primer metro de la plusmarquista mundial de los 5.000 metros, Gudaf Tsegay, de lanzar la carrera buscando evitar problemas de cara a lograr una plaza en la final. Su apuesta la respondieron la otra etíope, Welteji y la australiana Jessica Hull, obligando al resto de atletas a aguantar un ritmo endemoniado desde el primer metro.
Marta Pérez supo sufrir, corriendo evidentemente a cola del grupo pero sabiendo que eso le iba a llevar a lograr una marca sensacional si no alcanzaba la clasificación. Y así fue. Entrando décima en la última vuelta, necesitaba remontar cuatro posiciones si quería estar entre las 6 primeras y alcanzar una plaza de finalista. En una intensa guerra con la japonesa Tanaka durante casi 200 metros ganaba una posición y en la contramata lograba ponerse octava tras superar a la británica Walcott-Nolan. Así, acababa con fuerza la recta final pendiente más del cronómetro que de la posición hasta lograr pararlo en ese sensacional 3:57.75 que desde este jueves es el nuevo récord de España de los 1.500 metros.
No puede eso sí la soriana revalidad su plaza de finalista olímpica conseguida en Tokio, un adiós a la competición con un sabor muy dulce convirtiéndose en la española más rápida en la distancia.