La construcción de un puente provisional en San Esteban de Gormaz para salvar el corte de la N-110 por el derrumbe de parte del puente medieval pasa por el acuerdo del Ministerio de Defensa y el Ministerio de Transportes. Según ha explicado esta mañana Daniel García, alcalde de la localidad, la unidad de Pontoneros del Ejército podría levantar un paso provisional en aproximadamente una semana, pero hay parte de obra civil que requiere estudios previos, además del citado acuerdo. Como se adelantaba ayer, se construiría en el polígono de La Tapiada y permitiría desviar el tráfico pesado, soportando el paso de vehículos de hasta 50 toneladas según estiman los militares. 

"Tenemos una solución factible", ha asegurado el alcalde, "ahora es tema de voluntad política aunque creo que ni tiene que serlo, sino de solidaridad con nosotros". "Tenemos doce pedanias aisladas y somos cabecera de comarca", ha recordado. 

El lunes empezarán los análisis de la estructura del puente y el trabajo con micropilotajes. Además, mantendrán una reunión con la Diputación provincial cuyo presidente, Benito Serrano ha adelantado que dejarán medios de prevención y extinción de incendios permanentemente a ambos lados del puente para poder atender a toda la zona desde el parque de San Esteban de Gormaz y El Burgo de Osma. 

Ambos han reconocido que esperan una solución rápida. "Entendemos que es una estructura complicada, pero no vamos a aceptar excusas para el puente provisional", concluía el alcalde. 

En un mes y medio, si no se detectan más daños estructurales, podría reabrir el puente medieval para la circulación del tráfico ligero y el paso de peatones.  

Desde el consistorio estiman que 600 personas se ven afectadas directamente por la situación, además de los negocios.