La traída del ganado bravo desde Valonsadero a la plaza de toros de la capital es uno de los eventos más espectaculares y queridos de los sanjuanes, pero también el más complejo, tanto desde el punto de vista logístico como de seguridad de los participantes y espectadores por su duración y longitud, con un recorrido de alrededor de nueve kilómetros. Son muchos los parámetros que entran en juego en este festejo tradicional taurino soriano cuyo trazado discurre a campo abierto desde los corrales de Cañada Honda hasta la Vega de San Millán, pero que, pasado Valonsadero, se interna a través de la variante y el polígono industrial de Las Casas en el casco urbano hasta concluir en la plaza de toros de la capital.
Coordinar la labor de los caballistas y del personal de apoyo a pie con la seguridad de sanjuaneros y ciudadanos, el paso de los 12 novillos sanjuaneros y de los cabestros que les guiarán en parte del recorrido, así como el tráfico tiene en el vallado su máximo aliado y herramienta principal. Los operarios del Almacén Municipal del Ayuntamiento de Soria trabajan desde principios del mes de junio en la colocación del cercado festivo, una labor que no concluye hasta el mismo día de celebración de La Saca, para no interferir en el cierre de calles y del tráfico hasta el último momento y ocasionar los menores perjuicios posibles a los ciudadanos. Es, asegura la concejala de Obras y Servicios en el Ayuntamiento de Soria, Ana Alegre, una labor ingente «de mucho esfuerzo físico de cargar y descargar», de colocar las talanqueras y los listones que permitá que el festejo sea seguro y, al mismo tiempo, operativo.
El Consistorio lleva desde 2008 haciendo mejoras y completando el vallado de La Saca. Este año ha invertido una nueva partida de 50.000 euros para ello. Dentro de las labores llevadas a cabo se han reparado y sustituido todos los tablones de madera y los enganches metálicos que precisaban sustitución y, en el capítulo de obra nueva, se ha completado con otros 250 metros la barandilla metálica de la zona del mirador hacia la salida en dirección al antiguo hotel Valonsadero.
1.000 metros mejorados
entre la vega y el descansadero
Dentro del vallado se ha sustituido las maderas por material metálico en un tramo de un kilómetro entre la Vega de San Millán y el descansadero del Pinarcillo, junto a la antigua pista de tráfico, con el objetivo de evitar el paso a la carretera. En esta zona, destaca el Consistorio, se había detectado que la madera precisaba una sustitución a consecuencia de los daños ocasionados por el agua en las cunetas a lo largo de todo el año. Asimismo, en la zona del Pinarcillo se han instalado focos luminosos para facilitar la vuelta segura desde la zona de los chiringuitos.
Tan importantes como las talanqueras y tablones para evitar que los astados puedan salirse del recorrido de La Saca es mantener a punto las infraestructuras dispuestas a lo largo del recorrido para su descanso en las diferentes partes del festejo tradicional taurino. Por ello se han realizado también este año mejoras en el descansero del Pinarcillo como la sustitución de las puertas, que ahora son abatibles, y de otros mecanismos para garantizar su correcto (y rápido) funcionamiento. En línea con esto, también se ha procedido a mejorar los corrales del coso de San Benito, al que recalarán los novillos sanjuaneros tras un periplo de cerca de seis horas. También se han mejorado las puertas y los burladeros de la plaza.