Este pasado lunes se celebró, de forma telemática, la Conferencia Sectorial de Agricultura, en la que se vieron las caras el ministro, Luis Planas, y los consejeros del ramo de las comunidades autónomas. Al término de la cita, el Ministerio destacó los 45,8 millones de euros que se repartirán entre las diferentes regiones para los programas de promoción del vino en mercados de terceros países en 2025.
Las ayudas proceden del Fondo Europeo Agrícola de Garantía Agraria (FEAGA) y la convocatoria se realizó en septiembre de 2023. Con un presupuesto para esta medida de 55,59 millones de euros, las solicitudes presentadas han sido finalmente por un total de 45,8 millones. Por ello, el ministro Luis Planas ha planteado a los consejeros autonómicos del ramo elevar la subvención al 50%, máximo permitido, para los 673 programas presentados por las autonomías, que han mostrado su conformidad con la propuesta ministerial. Destaca el hecho de que, tras Castilla y León (el máximo beneficiario con casi nueve millones de euros), se sitúe el País Vasco (más de siete millones), muy por encima de otros territorios con más tradición y volumen vitivinícola como La Rioja (cinco millones) o Castilla-La Mancha (algo más de dos y medio).
Por su parte, el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de la Junta de Castilla y León, Gerardo Dueñas, se quejó de que en el orden del día de la Conferencia Sectorial solo figurara el punto referido al sector del vino, único sector del que ya hablaron ministro y consejeros en la anterior reunión oficial de octubre. Dueñas lamentó que Luis Planas obviara su petición, respaldada por otras comunidades autónomas, de tratar otras problemáticas de «especial urgencia» como son la revisión del sistema de seguros agrarios para que incluyan nuevas enfermedades como la enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE), la nueva normativa que regula la movilidad de animales, la renovación de proyectos de modernización de regadíos, los problemas de aplicación de la PAC que se estrenó en 2023 y los ecorregímenes, según detalla la Consejería.
En la misma línea, el consejero de Medio Rural de la Xunta de Galicia, José González, criticó al ministro por celebrar una Conferencia Sectorial «de trámite» y reprobó que «no hace ningún caso» de la demanda de abordar ocho puntos pedidos por carta por Galicia respecto a «cuestiones importantísimas». Los consejeros de los gobiernos aragonés y valenciano se expresaron de manera similar y pidieron una modificación del Plan Estratégico de la Política Agraria Común (PEPAC), un plan de coordinación de actuación frente a la EHE, así como una reforma de los seguros agrarios y la distribución de ayudas no discriminatorias para afrontar la sequía.
El Ministerio, por su parte, a pesar de que esos asuntos no se abordaron en la cita con los responsables autonómicos, emitió una nota tratando algunos de ellos, aunque de manera superficial y sin posibilidad de que las comunidades plantearan sus propuestas al respecto. En lo que se refiere a los seguros agrarios, Agricultura anunció en ese comunicado la creación de un grupo de trabajo para evaluar las disfunciones por las nuevas líneas de aseguramiento y para analizar los estudios de evaluación de impacto climático, sin concretar nada más.
Respecto a la sanidad animal, el ministro confirmó que esta misma semana está previsto celebrar una reunión con los directores generales para intercambiar puntos de vista en la que se debe hacer un balance del primer año de afectación de la enfermedad hemorrágica epizoótica, «tal y como me comprometí con vosotros». Los consejeros de varias comunidades, sin embargo, denunciaron la respuesta que el Ministerio ha dado a su última carta exigiendo un plan común de medidas y ayudas para hacer frente a esta epidemia que está causando «graves daños» a los ganaderos de toda España. En una misiva remitida este mismo lunes por el secretario general, el Ministerio asegura haber tomado ya las medidas que corresponden a sus competencias cuando, en realidad, sigue sin existir un plan coordinado que aborde esta problemática, detallan desde la Junta de Castilla y León. Por todo ello, los consejeros de esta región, Comunidad Valenciana, Aragón y Extremadura volvieron a insistir el lunes en sus peticiones a Luis Planas «para que escuche al sector y actúe para ayudar a agricultores y ganaderos a afrontar las consecuencias de todos estos retos a los que se enfrentan cada día para poder seguir alimentando a los españoles».
PEPAC.
Respecto a la Política Agraria Común, también fuera del orden del día de la Conferencia Sectorial, se le solicitó al Ministro «que impulse en Europa los cambios pertinentes para que la PAC se base en criterios agrarios y no solo exclusivamente medioambientales». En este sentido, Gerardo Dueñas ha recordado al ministro el documento acordado con las Organizaciones Profesionales Agrarias de Castilla y León con propuestas para modificar el PEPAC que hacen referencia, entre otras medidas, a eliminar la obligatoriedad de la rotación de cultivos como el maíz -que reduce la producción y, por tanto, provoca el aumento de los precios-, así como la supresión de la obligación de establecer barbecho en las superficies de regadío. Esta y otras comunidades también le trasladaron los problemas de aplicación de la PAC y los ecorregímenes y le pidieron que no deje fuera de ayudas en próximas convocatorias a sectores como el olivar y la viña, que son «los grandes olvidados de la última convocatoria».
Lo cierto es que los únicos consejeros que han planteado quejas tras esta reunión han sido los pertenecientes a gobiernos del PP o del PP junto con VOX en lo que parece una extensión de lo que se vive en la política nacional: los de un lado callados sea lo que sea lo que hace el Gobierno y los del otro criticando todo lo que pueden, con más menos criterio según la ocasión. Y no es eso lo que necesita el campo, sino unos políticos que trabajen para que los productores puedan vivir dignamente en vez de preocuparse por seguir en los sillones, lo unos, y por levantar a sus adversarios para ocuparlos ellos, los otros.