La segunda generación de inmigrantes: abriendo camino

A.P.L.
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'La brecha de los sueños', campaña de Accem, pretende el cambio de actitudes sociales y estereotipos que surgen a partir de la realidad que viven los jóvenes culturalmente diversos. Tres jóvenes sorianos reflexionan sobre la situación

La segunda generación de inmigrantes: abriendo camino - Foto: E.G.M Eugenio Gutiérrez Martínez

La segunda generación de inmigrantes, los que ya son sorianos de nacimiento y de sentimiento, sigue abriendo camino. Aunque lo tienen algo más fácil que sus padres en cuanto a oportunidades educativas y laborales, sí es cierto que merecen una especial atención desde el punto de vista social. Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) reflejan que el 27,7% de los nacidos en Soria en 2023 fueron de madre extranjera, casi un tercio. En el último lustro son el 23,6% (648 de 2.744). Sobre la procedencia de estas familias, de los 139 niños nacidos de madre extranjera en 2023, destacan los 29 de madre originaria de Marruecos, 14 de Colombia, 13 de Rumanía, 10 de Bulgaria, 9 de Venezuela y 8 de Perú y 8 de Ecuador. En 2010, de los 185 bebés, 52 tenían origen por parte de madre de Marruecos, 26 de Rumanía, 18 de Ecuador, 13 de Bolivia y 9 de Perú, según el INE.

Sin duda, este registro supone un impulso para la natalidad de Soria, pero también una realidad a la que hay que atender desde varios frentes, tanto desde la educación y el mercado laboral como desde los servicios sociales para atender a la igualdad y la integración de estos jóvenes que enriquecen culturalmente.

INICIATIVA. La ONG Accem detectó esta realidad hace tiempo y ha impulsado el proyecto 'La brecha de los sueños', que persigue «el cambio en las actitudes sociales y los estereotipos que surgen a partir de la realidad que viven los jóvenes culturalmente diversos, quienes tienen que afrontar situaciones discriminatorias, condicionando, en muchas ocasiones, sus aspiraciones y sueños». Además, pretende que estas generaciones pueda contar con referentes porque, si no es así, «hace que piensen que no pueden lograr según qué objetivos». 'La Brecha de los Sueños', en la que los jóvenes pueden inscribirse en la web de Accem, «nace para ayudar a construir una sociedad más inclusiva en la que la infancia y la adolescencia étnica y/o culturalmente diversas desarrollen todo su potencial», luchando contra el racismo, la xenofobia y cualquier otro comportamiento discriminatorio para romper la brecha. En este proyecto se han establecido varias alianzas a nivel nacional, destacando la Universidad de Valladolid (UVa). Desde la ONG hacen un llamamiento a la participación en talleres y actividades a centros y sociales de Soria.

Pedro de Santiago, portavoz de Accem, explica que la campaña se sustenta en datos del Informe de descendientes de inmigrantes nacidos en España, que dice que en 2023 solo el 38% de los jóvenes españoles con ascendencia diversa (uno o dos progenitores nacidos en otros país) contaba con estudios superiores, frente al 50,8% de jóvenes con ambos progenitores españoles. «Está claro que hay una barrera grande», comenta. El Instituto Universitario Ortega y Gasset recoge en un estudio que el 70% de los jóvenes de padres extranjeros aspira a tener estudios superiores cuando cursa secundaria (77% en el caso de mujeres) y solo el 57% considera realista llegar a esa meta. «Además de la mirada de la sociedad, muchas veces los contextos que tienen alrededor hace más complicado que puedan acceder a esa enseñanza y también los propios límites inconscientes que les marca el entorno», añade el portavoz.

Se están dando pasos importantes hacia la integración y para aceptar la sociedad actual como «diversa», pero siguen existiendo ciertas discriminaciones «aunque sea a nivel muy micro». El informe Discriminación en la UE dice que el 60% de la población española considera que tener un origen étnico o racial diferente puede llevar a situaciones de discriminación y el 58% habla directamente del color de la piel en relación a estas situaciones. En integración social, la búsqueda de vivienda presenta más dificultades o conseguir un empleo en el que compiten con personas de nacionalidad española. Un hijo de personas migrantes tiene que mandar cinco veces más currículum para conseguir un puesto de trabajo que un hijo de personas españolas, recogen las estadísticas. «Aunque esa discriminación no se reconozca o no sea algo de lo que se hable abiertamente y que esos mecanismos sean invisibles e incluso inconscientes para algunas personas, esta campaña quiere despertar una parte de esa conciencia hacia comportamientos discriminatorios en el día a día y poner el foco para reconocer a la sociedad española como diversa y en pequeños actos que incluso hacen que la juventud descendiente de inmigrantes se impongan límites por lo que absorben del contexto de forma involuntaria», concluye.