Valeria Romero Ortego celebra su centenario en Valdenebro

EDS
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El diputado Daniel García Martínez ha hecho entrega de una placa conmemorativa y del pergamino que contiene su acta de nacimiento, hoy hace cien años en la misma localidad

Valeria Romero Ortego celebra sus 100 años de vida en la localidad de Valdenebro. - Foto: Cedida

Hoy Valeria ha celebrado sus 100 años junto a su familia y vecinos. El diputado Daniel García en representación de la Diputación Provincial, ha hecho entrega de una placa conmemorativa y del pergamino con su acta de nacimiento. Por su parte, el acalde del Ayuntamiento de Valdenebro, José Antonio Cercadillo Ramos, ha entregado a la centenaria, una placa, una fotografía y un ramo de flores, transmitiendo así, la felicitación de toda la corporación municipal.

Valeriana Romero Ortego, más conocida como Valeria en la localidad de Valdenebro, nació el 9 de agosto de 1924 en Torralba de El Burgo. Es la segunda hija en una familia de siete hermanos por lo que desde su infancia tuvo que ayudar en las labores del hogar y las tareas del campo. Quehaceres de los que tuvo que hacerse cargo de una manera más intensa tras el fallecimiento de su madre cuando Valeria tenía 16 años. Cuenta que iba a la escuela cuando caía la noche ya que durante el día tenía que hacerse ocuparse de dar sustento a su familia.

A los 18 años se fue a servir a una casa de Madrid y posteriormente se trasladó a Barcelona donde siguió ejerciendo como empleada del hogar.

Un tiempo más tarde, a sus 24 años, regresó a tierras sorianas, concretamente a Valdenebro, donde se casó con Celedonio. Los primeros años de matrimonio los pasaron en casa de los padres de él y posteriormente se independizaron en una vivienda aledaña. Según su testimonio, era una casa en muy malas condiciones, pero dio a luz en ella a sus 5 hijos.

En esos momentos, el sustento de su hogar provenía tanto de las labores del campo como de la recogida de resina en el monte, que ella y su marido realizaban.

Ha residido de manera continua en Valdenebro hasta el año 2000, año en el que su marido falleció tras haber celebrado sus bodas de oro. Tras este hecho, comenzó a pasar temporadas en Barcelona, donde residen la mayoría de sus hijos, sin embargo, regresa a Valdenebro siempre que tiene posibilidad.

Sus hijos la describen como una mujer con mucho coraje y con una personalidad alegre. Su estado de salud es bueno, pese a la sordera que padece, mantiene conversaciones con su familia, la cual está compuesta en la actualidad por sus cinco hijos, siete nietos, diez bisnietos y sus respectivas parejas.