De 'padres' a 'hijos'

Diego Izco (SPC)
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Cada vez más, jugadores de dos generaciones comparten con naturalidad vestuarios o encuentros

Lamine Yamal y Robert Lewandowski, con casi 19 años de diferencia entre ambos, festejan juntos un gol - Foto: Vincent West (REUTERS)

Hace 34 años, uno de los gigantes de la historia del baloncesto europeo, el italiano Dino Meneghin, cumplió un sueño: 'Il monumento nazionale' tenía ya 40 años aquel 14 de octubre de 1990 cuando el Stefanel de Trieste, su equipo, recibía al Ranger Varese… donde jugaba su hijo Andrea, de 16. En los últimos siete minutos de partido, padre e hijo coincidieron sobre la cancha. «Cuando lo he visto enfrente me han invadido muchas sensaciones, pero sobre todo una: me he sentido viejísimo», decía. 
La ciencia aplicada al deporte ha logrado que, cada vez más, futbolistas de dos generaciones distintas compartan vestuario o partido en plenitud física. Hace no demasiado tiempo era imposible imaginarse a jugadores todavía 'frescos' más allá de los 33 ó 34 años; o futbolistas ya 'hechos' con 17 ó 18. Hoy todo ha cambiado: la preparación, la recuperación, la fisioterapia, la medición exacta de las capacidades de cada deportista… todo ello ha permitido ampliar el abanico de la 'edad perfecta' para la práctica del fútbol. Y en nuestra propia Liga encontramos compañeros de equipo con una diferencia de edad más que notable: 

Lewi-Yamal

Diferencia: ocho años, 10 meses y 21 días.
Cuando Robert Lewandowski logró 17 goles para ascender al Znicz Pruszkow de Tercera a Segunda (06/07), Lamine Yamal aún no había nacido. El pequeño genio azulgrana llegó al mundo el 13 de julio de 2007, y hoy por hoy forma una de las parejas de moda del fútbol mundial con alguien que podría ser su padre. 'Lewi', nacido en Varsovia en agosto de 1988, ha 'casado' su juego con el de Yamal: un rematador letal junto a un regateador de la vieja escuela (a pesar de su juventud) con un don innato para el último pase. Esta temporada, entre ambos acumulan 17 tantos (12 y cinco) y siete asistencias (dos y cinco). 

Modric-Endrick

Diferencia: 20 años, 10 meses y 12 días.
Tienen menos 'conexión' que los blaugrana, pero al coincidir sobre el césped son los 'dueños' de la mayor diferencia de edad entre dos compañeros de nuestra Liga. Luka Modric (9 de septiembre de 1985) apura sus últimos momentos de fútbol ampliando su legado a los más jóvenes… y de ahí viven jugadores como Endrick (21 de julio de 2006), nacido apenas dos meses después de que su compañero ganase el primer título de su vida, la Liga croata con el Dinamo de Zagreb. El 'diez' merengue saca 19 años cinco meses y 16 días a Arda Güler, uno de los muchos 'herederos' que le han colgado en los últimos tiempos. 

Albiol-Navarro

Diferencia: 19 años, siete meses y 21 días. 
Pau Navarro (25 de abril de 2005) es una de las jóvenes perlas de la cantera del Villarreal. Apenas ha jugado 16 minutos de Liga -es una pieza clave en el filial del 'submarino amarillo'-, pero lo hizo junto a uno de los grandes maestros: Raúl Albiol, a sus 39 años recién cumplidos, ya se había hecho con la titularidad en el Valencia (previo paso por el Getafe) cuando nació su hoy compañero y 'aprendiz'. De la primera plantilla, el campeón del mundo con España en el campeonato de Sudáfrica de 2010 saca 18 años, siete meses y 12 días a Ilias Akomach. 

Aspas-Sotelo

Diferencia: 16 años, 4 meses y 18 días.
Ambos nacieron en Vigo, ambos son canteranos celestes, ambos aman el escudo… aunque Iago Aspas llevaba ya nueve años en la cantera (y entrenaba con el primer equipo) cuando nació Hugo Sotelo (19 de diciembre de 2003), mediocentro del Celta con cinco duelos en LaLiga. 

Otros

Entre Jesús Navas e Idumbo, canterano del Ajax fichado este curso por el Sevilla, hay 19 años, siete meses y ocho días. Y también es elevada, en el caso del Girona, la diferencia de edad entre Christian Stuani y Misehouy, también canterano del Ajax que ya ha jugado cuatro partidos de Liga y marcado un gol:18 años, nueve meses y seis días les separan.