Justo cuando se cumple un mandato completo en funciones del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), el Partido Popular se abrió ayer a renovar el órgano de gobierno de los jueces tras las nuevas presiones del comisario de Justicia de la Unión Europea, Didier Reynders, quien reiteró que España debe proceder de manera inmediata a la renovación de esta institución.
«Nos vale renovar con el sistema actual, pero no haremos nada si no hay una nueva ley que modifique el sistema de elección al mismo tiempo. Debe ser simultáneo. Puede ser el mismo día, pero no después», explicaron a última hora fuentes de Génova.
Los populares admitirían renovar ahora el Poder Judicial siempre y cuando el Gobierno de Sánchez se comprometiese a aprobar una nueva norma para futuras remodelaciones. Ese es el compromiso que quieren atar los de Feijóo e insisten: «Ya no nos fiamos de este Ejecutivo. No es una garantía. Es que haya una nueva ley».
Previamente, Reynders compareció junto al ministro de Justicia, Félix Bolaños, en Bruselas para tratar ese asunto y su mensaje fue meridianamente claro. «Después de cinco años se hace más y más urgente la renovación», insistió el político belga.
El funcionario europeo sostuvo que la preocupación de la Comisión es el bloqueo porque está afectando, además, al funcionamiento de la Justicia y admitió que reformar el sistema es más complicado que llegar a una renovación puntual del órgano. «La Comisión Europea está abierta al diálogo y, si nos llega una propuesta que es objeto de un acuerdo de las fuerzas políticas en España la estudiaremos», señaló el comisario.
En este sentido, el comisario explicó que Bruselas no se opondría a que España procediera primero a la reforma del CGPJ y luego a su renovación si ello fuera fruto de un acuerdo entre los principales partidos españoles y ayudara a desbloquear la situación.
Y añadió que la opción preferida por la UE e incluida en las recomendaciones del informe anual sobre el Estado de derecho para España es proceder primero a la renovación y luego a la reforma del órgano de gobierno de los jueces.
Bolaños, por su parte, hizo un llamamiento al Partido Popular para renovar el Poder Judicial «por el bien de España» y para resolver la «preocupación» de la Comisión Europea por este incumplimiento que dura cinco años, un mandato completo.
«Les pido que cumplan la ley, que cumplan la Constitución y que lo hagan por el bien de España, del buen nombre de España, porque esto sí que es una preocupación de la Comisión Europea, que el Consejo General del Poder Judicial lleve ya cinco años sin haberse renovado», aseguró el titular de Justicia.
Horas antes, el portavoz del PP, Borja Sémper, fue directo en este asunto y exigió a Sánchez que acepte la reforma de la ley judicial para sentarse a negociar. «Si esto se acepta nosotros podemos hablar», y argumentó que la posición del PP ha quedado reforzada tras las «tropelías» del Gobierno, al que acusan de un intento de control de la Justicia.
Los populares piden que el PSOE acepte la reforma que Génova lleva en su programa para que los jueces elijan directamente a la mayoría del órgano, es decir a los 12 vocales del turno judicial, y despolitizar así el Consejo.
¿Dimisión en bloque?
Por su parte, la asociación judicial Juezas y Jueces para la Democracia y la asociación fiscal Unión Progresista de Fiscales, ante «las numerosas excusas que opone el PP para mantener su bloqueo durante años», solicitó la dimisión de los vocales, a quienes acusan de contribuir «al desprestigio de una institución» que «se encuentra en franca descomposición».
Mientras, la asociación judicial Francisco de Vitoria descartó esta vía ya que «nadie puede asegurar que eso provocaría la renovación del CGPJ» sino que más bien «lo que ocasionaría son aun más perjuicios» a los jueces, por lo que apostó por poner el foco en los presidentes del Congreso y del Senado, «únicos con legitimidad para iniciar el proceso de renovación».