Tras conseguir dos títulos de la Liga Nacional de Aragón, el BM Ágreda Femenino ha vivido tres temporadas en las que no ha tenido opciones reales de lograr un nuevo entorchado.Este año apuntaba a lo mismo, pero su entrenador, Juan Carlos Vera, ha dado en la tecla finalizando la liga regular en segunda plaza y consiguiendo que sean aspirantes a todo en la Final a Cuatro.
Las siete victorias consecutivas han dejado buen sabor de boca en el final de liga.
Necesitábamos este impulso final. Llevábamos una temporada irregular, en parte por la falta de entrenamientos, y creo que esto es un gran premio para el equipo. Hace unas semanas nos planteábamos entrar en la Final a Cuatro y al final somos segundas.
¿El ejemplo es la contundente victoria ante el Tarazona tras el empate de la ida?
El equipo ha sabido competir en los momentos clave y por eso han llegado estos resultados. Estaban creciendo poco a poco, pero al final tenías el miedo de saber si sería suficiente. Cuando la situación era límite hemos respondido, nos ha dado un plus y las jugadoras han conseguido un gran nivel últimamente.
¿Perder en enero con un rival inferior (Huesca) fue un punto de inflexión?
Fue un punto de inflexión porque pensábamos que nos quedamos fuera. Al perder el equipo salió muy dolido. Yo mismo me replanteé el trabajo hecho hasta ahora e hicimos un cambio total, dijimos que era el momento de darlo todo y sirvió.
Lo confirmaron tras ganar a un líder (Dominicos) que llevaba tres años sin perder.
Fue otro momento clave. Llegaron a Ágreda y salimos a demostrar lo que éramos. Ajustamos ciertas cosas diferentes y funcionaron. Además el pabellón estaba lleno y cuando llegaron los momentos de debilidad nos arroparon. Hicimos un balonmano perfecto y terminamos de creer que podíamos.
Parecía impensable hace un par de meses.
Siempre nos planteamos la FInal a Cuatro, el intentar estar con los mejores, pero dependemos de muchas cosas. Son pocos entrenamientos y muchas jugadoras tienen ya obligaciones laborales. Hace unos meses el objetivo era otro, pero hemos sabido cambiar el chip y esa mentalidad más ganadora nos ha llevado hasta este momento.
Habla mucho más de la faceta mental que del juego.
Llegó un momento en el que no encontrábamos la regularidad durante el partido. No me refiero al juego, sino a que nos caíamos en cuanto llegaban las dificultades y cometíamos errores impropios. Pero también tienes que jugar bien y eso lo hemos conseguido. Todo se ha ido ajustando como debería ser.
¿El objetivo a día de hoy tiene que ser el de intentar ganar la Final a Cuatro?
Antes no era el objetivo real. Ahora no voy a ocultar que queremos lo máximo, pero tenemos que tener los pies en el suelo. No somos favoritas y Dominicos y La Jota tienen más plantilla y posibilidades. No descarto nada y saldremos a pelear, pero nos debe salir todo muy perfecto para superar a esos equipos.
¿Les perjudica que falte un mes para la Final a Cuatro?
Otras veces nos ha venido bien para descansar, pero ahora firmaríamos jugar mañana. Estamos muy bien.