Abioncillo S.L., nueva etapa del pueblo escuela

A.P.L.
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Las instalaciones mantienen la actividad con la programación para colegios y los campamentos de verano, ya con el mes de julio al completo. Los responsables de la empresa llegan con ideas frescas

Abioncillo S.L., nueva etapa del pueblo escuela

El pueblo escuela de Abioncillo de Calatañazor, en el que muchos estudiantes han pasado los mejores ratos de su etapa escolar y de su infancia, inicia una nueva etapa en manos de la empresa Abioncillo S. S., que toma el relevo a la Cooperativa del Río que lo gestionó durante 40 años. En estos meses están pasando por allí colegios de Madrid y Barcelona, principalmente, con la idea de dar continuidad a la programación de campamentos que ya desarrollaban en la anterior etapa. «Hay tanto colegios concertados como públicos. Sí que es verdad que los concertados tienen más inquietudes por hacer actividades fuera del aula, pero también hay interés por parte de los públicos y también llegan a Abioncillo», comenta Bishma Hernández, CEOde la empresa.

De cara al verano, se muestran muy satisfechos por la respuesta a las convocatorias de campamentos. Las plazas para la primera quincena de julio se cubrieron en 25 horas y las de la segunda quincena a los pocos días, «con 77 niños de 8 a 14 años que proceden de toda España». Estos días trabajan para cerrar los campamentos de agosto, divididos en periodos de 12, 7 y 7 días a lo largo de ese mes. «También vienen del extranjero, como tres hermanos de Alemania», apunta Bishma Hernández, quien comenta que una catedrática de Estados Unidos también inscribe a su hija al campamento de Abioncillo. «Decía que desde que conoció Soria viene todos los veranos con su familia», por lo que este emprendedor también destaca que desde los campamentos de verano también se activa el sector del turismo.

 En el mes de septiembre, se hará un parón para «coger fuerzas» y «reparar instalaciones»; y en octubre se retomará la actividad. Ya hay reservas de colegios, comentan desde la empresa, «siguen estando contentos con la experiencia y tienen confianza en Abioncillo». En las instalaciones se ha hecho un cambio de look en alguna estancia, como los baños, pero en septiembre se invertirá en reparar los tejados y en fontanería, además de otras necesidades de mantenimiento que tienen que realizar para poner a punto el pueblo escuela. Sin embargo, la empresa no ha recibido ninguna ayuda para esta nueva etapa que acaba de comenzar con otra gestión.

En cuanto a las actividades que se desarrollan en los campamentos, la idea es mantener las mismas en el verano. «Los colegios lo que hacen es contratar un programa y nuestro compromiso de continuidad pasa por mantenerlas. Lo que sí nos gustaría es darle una vuelta a algunas de ellas», incide. Por ejemplo, hay un taller de comunicación con un programa de radio en el que «los chavales hacen una pequeña emisión y hablan de distintos temas» y ahora se querría dar una vuelta más y hacer un podcast, «que no sea solo radio, sino que también puedan poner imagen y trabajar en la importancia que tiene hablar en público y el cómo gesticular y transmitir esa información». Esa es la idea de algunos de los talleres, al tiempo que se buscarían nuevas opciones para que los diferentes educadores que están en las instalaciones también puedan desarrollar sus habilidades. «El potencial del pueblo escuela también son las propias personas que trabajan en él», subraya añadiendo que cuentan con monitores que tienen «inquietudes» muy diversas que se van a aprovechar.

potencial. El pueblo escuela tiene «un potencial tremendo» y en este nueva etapa, más allá de los colegios, se quiere extender la oferta para llegar a empresas y asociaciones con nuevas propuestas que permitan a los  usuarios crear ese 'out of the box thinking' ('pensar fuera de la caja'). «Abioncillo tiene un entorno privilegiado en el que se pueden desarrollar muchas actividades. Entre ellas, hay empresas de alto rendimiento que necesitan espacios para enfocarse cien por cien en resolver problemas. Ya no solo poner el foco en ello, sino poder tener una serie de actividades y un entorno que pueda llevarles a incentivar la creatividad», explica el CEO. 

«Aquí en Soria quizás es difícil de comprender esta necesidad, pero nos tenemos que poner en el lugar de una persona que vive en una gran ciudad y que su día a día es una hora de atasco para ir al trabajo, reuniones una tras otra, llamadas telefónicas también y que realmente no tienen tiempo suficiente como para poder tener foco», así que se apuesta por ofrecer a este tipo de empresas que puedan organizar salidas para resolver cuestiones y desarrollar creatividad e innovación. A Bishma Hernández, que viene de la gran empresa y que creó la empresa tecnológica Clever Solar Devices, le «apasiona» ese mundo, por lo que conoce bien las necesidades. 

Otra idea es enfocar la actividad a otro tipo de perfil, como por ejemplo asociaciones. «Por ejemplo, hay casos de padres que comentan que sus hijos con autismo y asperger no tienen un entorno en el que poder desarrollar de una forma controlada ciertas habilidades, como servir comida a sus compañeros, experimentar otras tareas, cortar leña...», así que lo que buscan los nuevos promotores es sacar provecho de ese entorno para que otro tipo de asociaciones puedan desarrollar este tipo de actividades educativas y que no estaba antes en el portfolio que había. 

Esto encajaría en los fines de semana por la «complejidad» de la actividad, aunque tendrían que estudiar con las propias asociaciones los diferentes intereses, dependiendo del grado de cada una de las problemáticas estarán interesados en más o menos tiempo y en contar con monitores especializados.