Laureano Echevarría siempre será recordado en la ciudad de Soria por defender la portería de aquel equipo que ascendió ascenso a Segunda División un Domingo de Calderas de 1997 frente al Recreativo de Huelva. Aunque la Copa del Rey del 96 «es donde más se nos conoce a los componentes de aquel equipo», como señala el exguardameta.
El que defendiera los tres palos del Numancia durante siete años volvía a la que un día fue su casa en el mes de noviembre. El Rayo Cantabria, club para el que trabaja como entrenador de porteros, se medía ante el Numancia en la primera vuelta de esta campaña. «Dando un paseo por la ciudad la gente todavía se acordaba de mi. Aquello fue muy bonito», explica el que fuera guardameta rojillo. Es más, el club le homenajeaba en su regreso a Los Pajaritos. «Lo recordaré toda mi vida. Que después de tantos años la gente se acuerde, que te tenga ese cariño, ese respeto, es increíble».
Los de Aitor Calle llegan a la jornada 30 dejando atrás un mes de marzo bastante negro. En cinco partidos, tan solo han sumado de tres ante el Salamanca y en la última jornada ante la Gimnástica Torrelavega. Al cuadro rojillo anotar fuera de casa se le está haciendo cuesta arriba. Es más, el otro conjunto que lidera la tabla, el Pontevedra, tampoco ha sabido sacar una victoria como visitante en este 2025. «Todos los equipos pasan malas rachas. Desgraciadamente al Numancia le ha tocado ahora», explica. «Sí que es verdad que estos últimos cinco partidos le han alejado un poco al Numancia del primer objetivo. Pero todo es posible. Mientras haya opciones, el Numancia todavía puede ser campeón de liga».
Por su parte, el Rayo no deja de ser un filial, y en ese papel de segundo equipo su objetivo es formar a jugadores que puedan optar a llegar al Racing de Santander. Sin embargo, en los últimos cuatro años que el cántabro ha entrenado a los porteros del conjunto verdinegro han jugado dos fases de ascenso. «En una competición con 18 equipos. Cinco desciendes, uno promociona y otros cuatro juegan fase de ascenso, todo puede cambiar en poco tiempo. A nada que tengas dos semanas seguidas resultados negativos, te penaliza en la clasificación», explica.
Este domingo a las 12:00 el conjunto soriano se verá las caras en tierras cántabras con el actual equipo de Echevarría. «Indudablemente los intereses se cruzan», analiza el técnico. «Somos profesionales y nos dedicamos a esto, pero en cuanto se cumplan los 90 minutos todos volveremos a ser amigos».
TODA UNA VIDA BAJO PALOS. El mítico portero dejaba atrás el Numancia en 1997. Tras pasar por numerosos equipos se retira en el CD Aurrerá de Vitoria al inicio del milenio. A partir de ahí, volvió a su tierra donde entrenó a los porteros de la Gimnástica Torrelavega durante 13 temporadas. Pasó también por el CD Cayón y el Portugalete ante de instalarse en Santander. En resumen, toda una vida entre los tres palos. «Es un amor infinito por la portería», afirma el entrenador. «Cada día me levanto con la misma pasión que el primer día. Es algo que me llena mucho, tengo una ilusión terrible, la misma que si fuese un crío».