Berlanga de Duero luce radiante tras entrar en la red de los Pueblos más Bonitos de España, lo que pondrá en valor a este enclave monumental, histórico y natural de primer orden relacionado con personajes tan ilustres como María de Tovar, Fray Tomás de Berlanga y el mismísimo Cid, su primer alcalde. Varios de sus vecinos manifiestan a El Día de Soria que Berlanga «siempre ha sido uno de los pueblos más espectaculares de España», pero para muchos pasaba desapercibido... Ahora la intención es potenciar aún más el turismo y dinamizar la economía para frenar la despoblación, que ha hecho caer el número de habitantes a los 850.
El ayuntamiento berlangués, tras comprobar que se cumplían los requisitos para acceder a esta red de la que en Soria ya forman parte Medinaceli, Vinuesa, Monteagudo de las Vicarías y El Burgo de Osma, preparó un proyecto y realizó una serie de mejoras que se consideraban necesarias. «Creemos que puede ser un revulsivo para la economía local», indica el alcalde, Enrique Rubio, apostando por «visibilizar» al pueblo y los alrededores a través de iniciativas que contribuyan al mantenimiento demográfico.
El propósito es promocionar aún más los «momentos históricos de esplendor» que convirtieron a esta localidad en primera potencia mundial, lo que se comprueba a través del patrimonio conservado con mimo y cariño como señas de identidad. Sin duda, destacan la Colegiata de la Virgen del Mercado, el imponente castillo rehabilitado y el palacio renacentista con planes de mejora en marcha, entre otros elementos históricos y enclaves naturales, como el cañón de Lumías con los lirios de primavera, la hoz del Escalote…
El alcalde hace referencia, con gran orgullo, a figuras históricas como María de Tovar, marquesa de Berlanga y artífice cultural en el siglo XVI; Rodrigo Díaz de Vivar 'El Cid', el primer alcalde; y Fray Tomás de Berlanga, «un humanista del siglo XV de referencia y el soriano más relevante a nivel internacional». «Los principios y las bases que asentó son los suficientemente sólidas para apoyar en esta figura el futuro de Berlanga», subraya incidiendo en la jornada celebrada esta misma semana sobre Fray Tomás, que podría dar paso a un ciclo cultural anual.
Este hijo de agricultores de Berlanga fue el precursor del Canal de Panamá y defensor de los derechos de los indígenas. Como curiosidad, «gracias a él podemos comer una ensalada de tomate o un pincho de tortilla, porque trajo de América estos productos y llevó allí los plátanos».
«único a nivel mundial». El responsable de la oficina de turismo, Jesús Salvador Cartón Torres, apunta que este pasado puente de la Constitución se han recibido casi mil visitantes en la torre del palacio de los Marqueses de Berlanga, y «van en aumento». Este historiador de Zaragoza reconvertido en guía turístico y tras 12 años en el pueblo, reconoce que es un apasionado de la villa y que cuando la descubrió le impresionó la riqueza patrimonial.En el centro, junto a Cristina Mingueza, muestran la riqueza cultural y realizan visitas guiadas. «El turismo es un motor económico y es una forma de generar riqueza y que la gente venga a vivir aquí. Berlanga es un lugar para quedarse», asegura añadiendo que «Berlanga no solo es uno de los Pueblos más Bonitos de España, sino que es único a nivel mundial».
Jesús nos habla del castillo, «la fortaleza artillera de cuento» construida por María de Tovar, como la colegiata; y del palacio, obra de su hijo Juan para completar el proyecto de su madre junto al convento y el hospital. Nos muestra la exposición de este palacio de la Asociación de Amigos del Castillo, con impulsores como Francisco J. Hilario de Pablo, cronista de Berlanga, y su sobrino Roberto de Pablo. Entre muchos datos de interés que merece la pena conocer y que se muestran en la torre, las maquetas y el audiovisual, apunta como curiosidad la relación de los Tovar con los dragones, como se ve en los capiteles.
El ejército napoleónico «quemó» el palacio y otras muchas casas palaciegas, pero lo que se conserva se documenta a través de un gran trabajo de investigación y se pone en valor.
Por allí se encuentra la fotógrafa Blanca Almazán, vecina de Berlanga, quien cree que el pueblo se implica en el impulso turístico y cultural. «Sobre todo, de un tiempo a esta parte, le damos más valor a lo que tenemos y somos conscientes de que dar a conocer nuestro patrimonio es una forma de aportar riqueza», indica elogiando el patrimonio tan «variado y numeroso». Así, pone como ejemplo «la historia que se cuenta dentro de la colegiata», reflejando que «en un momento Berlanga fue uno de los lugares más importantes de España al concentrar mucho poder».
«se va a notar». En un paseo por el pueblo, nos acercamos a la panadería, donde Eleuterio Muñoz, de 90 años, nos habla de los monumentos que recomienda y su hijo Ramiro de los enclaves naturales. La empleada, Ángeles Martínez, cree que entrar en esta red «se va a notar» y que la figura histórica de Fray Tomás debería ponerse más en valor.
Junto a la plaza con soportales tradicionales, hablamos en el supermercado con Tania Raquel Armijos, de Ecuador, que junto a su marido regenta este negocio y una casa rural llamada Islas Galápagos por esa especial relación con Fray Tomás, ya que fue quien las descubrió, y por sus propias raíces. «Hay turismo de temporada o de fin de semana», dice confiando en que el sector reciba un nuevo impulso con esta iniciativa. «Pero es muy complicado porque la gente que vive aquí no valora lo que tiene… Yo quiero a Berlanga y me preocupo, por eso he invertido aquí», indica.
En el estanco, donde venden recuerdos de este monumental pueblo, Merche es optimista. «Cada vez hay más turistas, los fines de semana y a diario, está mejorando mucho y eso mueve la economía. Además, se ve, no es porque tenga un negocio, que Berlanga sorprende a todo el que viene y eso hace que vuelvan», apunta reconociendo que, por supuesto, hay épocas del año mejores que otras. Según ella, hay que apoyar el teletrabajo, que se va implantando poco a poco, y ofrecer vivienda a los jóvenes para que se instalen en una localidad donde hay muy buena gente. En la farmacia, Pablo Ramón y Aurora Corredor, coinciden en que Berlanga «es un pueblo espectacular» y que trabajar en la plaza «es un privilegio».
En el restaurante Casa Vallecas, Jesús de Pablo reflexiona sobre la España Vaciada tan olvidada y es muy pesimista en cuanto a su futuro y el de toda la provincia, por muchas iniciativas que se pongan en marcha. «Habrá más turismo, pero solo los fines de semana», comenta. Su sobrino bromea diciendo que «el pueblo ya es bonito y atrae a mucha gente, pero lo sería mucho más si no lo hubieran quemado los franceses…». Unos vecinos, en la terraza, hablan sobre los inconvenientes de residir en el medio rural, porque «es caro»; aunque también reconocen la calidad de vida, la socialización y las mejoras que se van realizando para ofrecer la mejor imagen. También lamentan que se esté vaciando y «que haya aún unas cuantas casas hundidas y solares tirados».
Un grupo de mujeres en uno de muchos establecimientos hosteleros asegura que Berlanga, como uno de los Pueblos más Bonitos de España, «tendrá más turismo pero no más habitantes». De este pueblo destacan lo vien que se vive, especialmente los jubilados, y las actividades que se organizan, también en asociaciones como La Rueda y Fray Tomás. A la agricultura y la ganadería se ha sumado el turismo, pero que los visitantes llegan solo los fines de semana…