La Consejería de Movilidad y Transformación Digital abrirá antes de que acabe este año 40 kilómetros de siete nuevas pistas ciclistas, situadas en seis provincias de Castilla y León, tras completar unas actuaciones cuya factura ronda los 15 millones de euros. Estos proyectos, cofinanciadas con fondos europeos Next Generation, se suman al puesto en servicio en marzo entre Villalobón y Palencia. Estas obras, según fuentes del departamento de María González Corral, se enmarcan en el plan para la promoción de la movilidad sostenible en Castilla y León que contempla un total de ocho carriles bici que van a suponer más de 45 kilómetros de pistas ciclistas y una inversión de casi 15,7 millones de euros. El primero que se ha estrenado es el palentino, de 1,78 kilómetros en la P-403, tras una inversión de 846.191,15 euros. Asimismo, Movilidad está acometiendo los últimos remates en el carril bici de Valladolid, que se ha construido en la margen izquierda de la VA-113, entre la ronda VA-20 de la capital y la localidad de Santovenia de Pisuerga, a lo largo de un tramo de 2,5 kilómetros. La obra, que se pondrá en servicio en breve, ha supuesto una inversión de unos 1,44 millones, ha supuesto también el ensanche de la calzada por la margen derecha.
En la misma situación se encuentra el proyecto de la Consejería en Salamanca, donde además se ha generado una senda peatonal, con especies vegetales. En este caso se ha actuado en la SA-300, en el municipio de Villamayor de la Armuña, donde se ha generado una pista ciclista de 1,12 kilómetros, que enlaza con la parte ya concluida en el término municipal de Salamanca, desde la avenida de Carmen Martín Gaite, con la glorieta del Obispo Mauro Rubio, hasta Villamayor. Tras estas dos inauguraciones, el calendario de trabajo de Movilidad recoge para mediados de verano poner en servicio el carril bici de Ávila, que supondrá la unión de la capital y la localidad de Aldea del Rey a través de una pista independiente y paralela a la AV-900 de 6,77 kilómetros, que ha requerido una inversión de 1,58 millones. En concreto, el recorrido está acotado entre la explanada de acceso peatonal al parque natural El Soto, en la capital, y el cruce del Camino del Molino, en las inmediaciones de la otra localidad, con lo que se da continuidad a otro existente en la margen derecha de la vía.
Recta final del año
Imagen de un hombre paseando por un carril bici. - Foto: Ingrid FernándezEn el último trimestre, Movilidad prevé tener terminado uno de los dos proyectos que se ejecutan en León. En concreto, se refiere al que atraviesa el municipio de San Andrés del Rabanedo, desde el inicio de la avenida San Ignacio de Loyola, y la glorieta que da acceso a Villabalter. En este caso se construyen dos carriles-bici unidireccionales y paralelos a cada margen de la CL-623, de 1,9 kilómetros, con un desembolso total de 1,31 millones.
Otras tres obras finalizarán cuando termine el año. Se trata del segundo tramo de la pista ciclista de León, para unir mediante carril-bici San Andrés del Rabanedo y Lorenzana, lo que supondrá una inversión de 4,11 millones. La obra consiste en la construcción de dos carriles-bici unidireccionales y adosados a cada uno de los dos márgenes de la CL-623. En concreto, se prevé intervenir en el tramo comprendido entre la glorieta que da acceso a Villabalter y el inicio de la travesía de Lorenzana, atravesando los municipios de Sariegos y Cuadros. Los mismos plazos maneja la Consejería para el proyecto de Burgos, que busca conectar la capital, Cardeñajimeno, Castrillo del Val, Carcedo de Burgos, Modúbar de la Emparedada y Cardeñadijo mediante un carril bici bidireccional y una senda peatonal de 15 kilómetros, con una inversión de 3,77 millones.
El tramo inicial coincide con la actual Vía Verde del ferrocarril Santander-Mediterráneo hasta la entrada al municipio de Cardeñadijo, por donde continuará hasta conectar con la BU-800. A la salida de Cardeñadijo el carril bici se situará en el margen derecho de la calzada hasta cruzar al margen izquierdo a la altura del acceso a la urbanización Cuatro Olmos. Continuará así hasta su paso por Cardeñajimeno donde volverá a cruzar al margen derecho, por donde discurrirá hasta el final del tramo en el Parque de Fuentes Blancas de la capital burgalesa.
Por último, en el caso de Zamora, la pista ciclista estará lista este año tras un desembolso de 2,08 millones. El proyecto prevé la creación de una senda bidireccional de diez kilómetros de recorrido que discurrirá de forma paralela a las carreteras CL-605 y ZA-623. El trazado comienza en Moraleja del Vino, continúa por Casaseca de las Chanas, donde se adentra por sus calles y a la salida se dirige hacia Arcenillas, donde tras superarla, llegará a la ZA-610 y la ZA-P-1102 a la altura del Vivero La Pérgola, hasta entroncar con el itinerario de la capital.