La Consejería de Medio Ambiente adjudicó el contrato de construcción de una planta de eliminación de nitratos del agua para consumo humano en la localidad soriana de Nolay que costará, según el importe de adjudicación, 234.999 euros.

Esta actuación, que se realizará en un plazo de ocho meses, recibe la ayuda del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España, que se financia con fondos Next Generation EU. El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico tiene especial interés en que se actúe para proteger las aguas contra la contaminación producida por los nitratos.

La localidad de Nolay cuenta con un sistema de abastecimiento formado por una captación de tipo superficial y un depósito. Ambos se encuentran próximos a la carretera SO-P-3106. La captación se encuentra a 1,5 kilómetros de la localidad, en una zona verde con vegetación arbustiva, lugar de recogida de las aguas subterráneas de baja profundidad y superficiales por medio de zanjas drenantes, que, tras dos registros previos a modo de arquetas de hormigón, acaban en una caseta de hormigón con una llenado de agua permanente.

El depósito actual se encuentra a 1,1 km de la localidad y a algo menos de 400 metros de la captación. Se construyó en 2001. Es de hormigón armado y tiene una capacidad de 100 metros cúbicos. El trazado de la tubería de abastecimiento al núcleo siempre es paralelo a la carretera SO-P-3106, que une las localidades de Morón de Almazán y Nolay entre otras. Se sitúa a unos 8 o 10 metros del borde.

Del depósito salen varias tuberías de PVC en dirección al pueblo. Una de ellas, termina junto al arroyo Valhondo a unos 900 metros del depósito, a modo de desagüe del depósito. Las dos tuberías restantes se dirigen al punto alto del casco urbano, de forma que una de ellas conecta directamente el rebose del depósito antes mencionado al depósito existente en el núcleo, mientras que la tubería que sale del fondo del depósito se conecta con la red de distribución del pueblo.

En las analíticas del agua de consumo humano realizadas en Nolay desde 2016, se registró valores de nitratos por encima de los valores permitidos por la legislación vigente (del orden de 60-65 mg/l). Estos valores altos, por encima de 50 mg/l, podrían venir motivados por la contaminación de las aguas en las zonas de recarga de las captaciones que suministran el agua para el abastecimiento.

El consumo máximo estival estimado es del orden de 30 metros cúbicos diarios por lo que no existe problemas de cantidad en el suministro de esta localidad que tiene censados 50 habitantes.

Las obras que se acaban de adjudicar permitirán la construcción de unas instalaciones para la eliminación del nitrato de las aguas de consumo humano, planteando una ósmosis inversa de una producción de dos metros cúbicos por hora de agua permeada, así como todos los elementos de control para su correcto funcionamiento.

Las nuevas instalaciones de tratamiento de ósmosis, se ubican junto al depósito actual. En cuanto al trazado del desagüe este transcurre por un camino de titularidad pública.