La transición energética hacia una economía libre de emisiones es un reto global. Y, en este contexto, nuestro papel como ciudadanos es imprescindible. Porque no somos meros observadores de las políticas y medidas frente al cambio climático, sino que somos un agente más que puede contribuir al objetivo común. También, que puede beneficiarse del cambio.
El nuevo podcast de Futuro Verde versa de eso precisamente, de los beneficios que implica apostar por la energía renovable para las comunidades, para la sociedad, para el territorio.
Un informe publicado a mediados de año por la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA) lo deja claro: si duplicáramos la participación actual de las energías renovables en la combinación energética mundial, el producto interior bruto (PIB) mundial aumentaría hasta en un 1,1 por ciento para 2030. Y es que estas tecnologías proporcionan beneficios directos e indirectos, a escala macro pero, también, micro.
Hablamos de creación de empleo, de rentas para el mundo rural, de ahorro en la factura eléctrica, de independencia energética y precios estables, de menor impacto climático... pero, también, de otras iniciativas novedosas.
Invertir en renovables.
En contraste con el modelo energético tradicional, donde el ciudadano era un consumidor de energía, las renovables permiten al ciudadano participar activamente en actividades antes restringidas, como la generación de energía o la obtención de beneficios, y ser agente del cambio.
Pero lograr que la participación ciudadana sea un elemento central en el nuevo modelo energético requiere de soluciones creativas y novedosas. También seguras. Futuro Verde presenta una de ellas. Se trata de Fundeen, la primera plataforma de financiación colectiva autorizada por la Comisión Nacional del Mercado de Valores que permite a particulares invertir en proyectos de energía renovables. El CEO y cofundador de Fundeen, Nacho Bautista, presenta el proyecto.
Revertir en el territorio: el modelo de Tierras Altas
Una de las claves es que los proyectos reviertan en el territorio y apostar por las renovables puede ayudar a cambiar el rumbo de nuestros pueblos o, al menos, a reescribir de algún modo el presente, y el futuro.
Pero el éxito del despliegue de los proyectos renovables depende -y mucho- de motivar un escenario donde todos y cada uno entendamos que podemos ser parte activa de la revolución energética. Además, avanzar hacia ese futuro verde depende también -y mucho- de ofrecer garantías a los ciudadanos, que haya una percepción de que ese incremento de generación de energías renovables genera calidad de vida, dinamismo social y económico en el territorio y, en definitiva, que mejora la sociedad en la que vivimos.
La energía también está fuera de las grandes ciudades. Futuro Verde presenta el modelo de Tierras Altas, donde hace ya tres décadas que apostaron por las renovables y, en concreto, por los parques eólicos. Precisamente para gestionar los recursos que ingresaban los municipios por el desarrollo de estos parques, el 14 de enero de 1995 se constituyó la Mancomunidad de Tierras Altas, con el objetivo claro de que esos ingresos revertieran en el territorio. La agente de desarrollo rural de la Mancomunidad de Tierras Altas, Raquel Soria, explica cómo ha cambiado la comarca en estas tres décadas y qué efecto ha tenido esta apuesta por las energías limpias.
Vientos de Futuro
El viento que barre nuestros territorios actúa desde hace ya unos años -concretamente 30- como impulso de nuestros pueblos, tratando de revitarlizar tierras tremendamente dañadas por la despoblación.
Vientos de Futuro es un movimiento colaborativo que reivindica precisamente esto, la importancia de la energía eólica como apuesta de futuro, como generador de oportunidades. También como motor de cambio e impulso del territorio. Carlos Martí, portavoz de Vientos de Futuro, explica la iniciativa.
Covaleda, apuesta por la sostenibilidad
De la comarca... al municipio. En pleno pulmón de Soria, en Pinares, Covaleda se ha convertido en ejemplo a seguir como municipio que apuesta fuerte por la ecología y el medio ambiente.
En Covaleda trabajan con responsabilidad por reducir la huella de CO2, por un consumo responsable... pero, además, este municipio soriano es receptor indirecto de los beneficios que supone apostar por las renovables. Allí los ingresos no entran a las arcas municipales directamente por el desarrollo de parques eólicos, fotovoltacios... sino que entran gracias a la línea de colaboración que el Ayuntamiento ha abierto con empresas del sector como Solarig o con iniciativas como Desafío Urbión. Son iniciativas sostenibles, respetuosas con el medio ambiente, con un impacto positivo en el entorno... El matrimonio entre Desafío Urbión, Solarig y el Ayuntamiento ha dejado una huella importante en Covaleda, un bosque sostenible, un proyecto pionero del que ya se puede disfrutar. Su alcalde, José Llorente, repasa las iniciativas que se desarrollan en esta línea en el municipio.