La Comisión Territorial de Patrimonio Cultural reunida en la mañana de hoy bajo la presidencia de la delegada territorial, Yolanda de Gregorio, ha autorizado las obras de urgencia para la consolidación y estabilización del agrietamiento en el muro de la fachada norte del Palacio Hurtado de Mendoza de Almazán, promovidas por Herederos Familia Alonso-Martirena.
El pasado día 19 de abril de 2024 tiene entrada en el registro del Servicio Territorial de Cultura, Turismo y Deporte, documentación relativa a la solicitud de autorización para obras de consolidación y estabilización del agrietamiento en la fachada norte del Palacio de Altamira. El día 30 de mayo de 2024 emitió el acuerdo para autorizar la intervención con las siguientes prescripciones técnicas: se insta a realizar un estudio de estabilidad de la ladera y un estudio completo de las deformaciones del ala norte del edificio; se deberá anclar la parte inferior, de forma similar a la superior, y unir ambas partes con perfiles verticales, además indica que no está autorizado el uso de espumas de poliuretano para el sellado de las grietas.
El 16 de agosto de 2024, entra nueva documentación por evolución de la grieta existente, solicitando las obras de urgencia para consolidación y estabilización del agrietamiento del muro. La Arquitecta del Servicio Territorial emite el siguiente informe: <
En el informe técnico elaborado a petición del propietario, indica que el día 13 de agosto de 2024, en la visita realizada con propietarios y contratistas para la ejecución de las obras de consolidación y estabilización de la fachada, se observa la posibilidad de un colapso de derrumbe inminente de esta parte del muro con desprendimiento.
El día 13 de agosto, el Ayuntamiento de Almazán informo de la situación a la Junta de Castila y León, la cual se dispuso a cortar la Ronda del Río Duero de inmediato para evitar posibles afecciones.
La Ponencia Técnica propone autorizar la intervención de manera inmediata con las siguientes prescripciones técnicas: ejecución urgente; previo al inicio de cualquier actuación y de forma inmediata se debe valorar la carga que soporta el muro y descargarlo mediante los apeos oportunos para evitar daños en la arcada superior y en la cubierta; las estructuras auxiliares deben ser estables y resistentes a las acciones previstas y deben permitir una correcta sujeción sin deterioro del elemento que sustenta; se colocará una malla de protección, unida a la estructura de acero, hasta la restauración del muro que retenga la caída de piedras en caso de producirse algún pequeño desprendimiento; una vez apuntalado el muro se deberá plantear, de forma inmediata, dada la importancia del asunto, la solución para la restauración del mismo, considerando el apuntalamiento como una solución provisional; se realizará una inspección completa de al menos todo el ala norte del palacio para poder realizar un "mapa de grietas" dado que se tendría una visión más amplia tanto de las deformaciones existentes, así como un análisis del sentido en el que se están produciendo las tensiones de toda la zona afectada permitiendo una mayor aproximación del origen de las mismas, el estudio completo debería comprender los muros, el terreno de la ladera, la cubierta, los alfarjes, las pinturas murales, etc, recomendando el uso de georradar; por último, el empleo de espumas de poliuretano se ceñirá exclusivamente a la zona del muro en riesgo de derrumbe, y cuando se proceda a la reparación de esta zona se eliminará.
Se insta a que se planifique una intervención de consolidación y restauración por fases del Palacio, recordando a los propietarios, poseedores y demás titulares de derechos reales sobre bienes integrantes del Patrimonio Cultural de Castilla y León que están obligados a conservarlos, custodiarlos y protegerlos debidamente para asegurar su integridad y evitar su pérdida, destrucción o deterioro.
Asimismo, se solicita la valoración de la limpieza de vegetación existente por parte del propietario de la ladera próxima al muro afectado.