El Certamen Internacional de Cortometrajes Ciudad de Soria inaugura su XXVI edición este viernes 8 de noviembre con su tradicional gala de apertura en el Centro Cultural Palacio de la Audiencia. Desde ese momento y hasta el próximo domingo 17 de noviembre el público soriano podrá disfrutar de proyecciones cinematográficas de las secciones paralelas y la oficial a concurso (51 filmes de 14 países distintos competirán por el palmarés del Festival), talleres de interpretación o de animación para los más pequeños, conciertos, presentaciones, charlas... Todo un entramado de participaciones, colaboraciones e intenso trabajo que comienza a prepararse con un año de antelación. «Casi como las fiestas de San Juan», señala con sentido del humor Eder García, concejal de Juventud en el Ayuntamiento de Soria, departamento que se encarga de la organización del Festival desde sus inicios. 

«En diciembre acabamos la producción de cada edición y en enero ya ponemos en marcha las bases para una nueva edición», indica Yolanda Benito, coordinadora de este evento cinematográfico. Con la apertura del plazo de inscripción de obras, el Ciudad de Soria se asegura su 'materia prima': cortometrajes venidos desde todos los rincones del mundo. Con este paso, el motor del Certamen se pone en marcha. Es entonces cuando entra en escena la importante labor del comité de selección, un grupo de cinéfilos y amantes del séptimo arte que tienen la importante (y laboriosa) tarea de elegir qué filmes se verán finalmente en las pantalla del Palacio de la Audiencia (sede de la sección oficial a concurso) y de los cines Mercado, donde se proyectan secciones paralelas ya muy arraigadas entre el público soriano como Cortos de memoria, En precario, Saboreando cortos o Cuestión de sexo, entre otras. «El objetivo es que para principios de septiembre ya tengamos la lista de los cortometrajes seleccionados», explica Benito, especialmente  de cara a las puntuaciones para los premios Goya, del que el Ciudad de Soria es certamen colaborador en las nominaciones a las distintas categorías vinculadas a este formato.

Septiembre, insiste Benito, es un mes «clave» en la organización del Festival, pues comienza «la producción» del certamen como tal de todas las actividades que los espectadores sorianos podrán disfrutar en consonancia con el país invitado, este año: Brasil. «La potencialidad de su música, del movimiento, de la biodiversidad, de la fuerza de la naturaleza... Todo eso vamos a intentar transmitirlo a lo largo del Certamen», avanza Yolanda Benito, decidida a hacer ver al público que el país carioca es mucho más «que fútbol y samba». 

El Festival es, eso sí, algo «muy vivo» y a lo largo de sus meses de preparación siempre es necesario tener un plan B o incluso C. Siempre puede ocurrir algo que tire por tierra todo el trabajo previo. «Pero no pasa nada. Hay que mantener la actitud y el control. Todo es armonía y visión dron de las cosas», añade con humor la coordinadora del Festival desde el año 2021. 

Dos personas en producción ultimando todos los detalles para hacer realidad todos los eventos del programa; el proyeccionista, que se encarga de montar todas las sesiones cinematográficas con las obras seleccionadas y, especialmente, el departamento de diseño y página web y redes sociales, el único que se mantiene en funcionamiento a lo largo de todos el año, son esenciales para poner en marcha cada edición. Pero a esta labor imprescindible se suma la de colaboradores, patrocinadores y entusiastas cuya labor es igualmente vital para el buen desarrollo del Certamen. «Este es el trabajo de mucha gente que pone en esto mucha ilusión», confiesa Yolanda Benito. 

«Cada uno tiene su función. La que más trabajo tiene [en las últimas semanas] es Producción, pero  todos somos igual de importantes. Esto es un engranaje» en el que del trabajo de cada uno depende el de todos, reconoce la coordinadora del Ciudad de Soria.  

grandes embajadores. El concejal de Juventud asegura con humor que a él le toca «la parte más fácil». Muy agradecido a la gran labor que realiza el equipo organizador del Festival, su papel continúa en el plano más institucional contribuyendo a seguir «haciendo familia» entre los jóvenes realizadores y la ciudad. Desde sus inicios, el Certamen Internacional de Cortometrajes ha tenido muy a gala «su cercanía» y la atención que brinda a sus participantes y colaboradores. «La gente viene encantada», indica García, y se va aún más encantada con la ciudad. «Está garantizado que todos los que vienen se convierten después en grandes embajadores de la ciudad de Soria», añade el edil de Juventud. 

Cineastas ya consagrados como Rodrigo Cortés (que actualmente tiene en cartelera su última película, Escape, producida por Martin Scorsese), Borja Cobeaga (Ocho apellidos vascos), Daniel Sánchez Arévalo (Primos, Diecisiete), Caye Casas (La mesita del comedor), entre otros muchos, engrosan la lista de 'cachorros' del Festival, cineastas que dieron sus primeros pasos en certámenes similares y para los que Soria significó en algún momento un punto de inflexión en su dedicación cinematográfica. 

Esa gran hospitalidad soriana se reforzará este año con la del pueblo brasileño que es «todo 'coração'», indice Yolanda Benito. Durante los 15 días que dura el Certamen, la capital soriana se convertirá en una especie de ventana hacia este país empezando, subraya la coordinadora del Festival, por su magnífica cinematografía a la que homenajeará  el Grupo de Teatro La Bo-eme en su ya tradicional sección Saliendo de la pantalla representando escenas de filmes como Central do Brasil, de Walter Salles; El beso de la mujer araña, de Héctor Babenco y Doña Clara, de Kleber Mendonça. Con una programación que en los últimos años ha encontrado un esquema de éxito (cursos formativos, proyecciones, música y actividades para los públicos), el Certamen Internacional de Cortometrajes Ciudad de Soria siempre busca la sorpresa y, sobre todo, seguir creciendo. Por eso este año, entre las novedades, se incluye un nuevo galardón en su palmarés: el premio al Mejor Vestuario. Para ello es vital la colaboración de un buen número de patrocinadores que, con sus aportaciones, lo hacen posible. «Caja Rural, Torrezno de Soria, Malvasía, Fundación Jesús Pereda, Recuerdo y Dignidad, Madera Pino Soria, Paradores, Multiópticas, Casino Círculo Amistad Numancia, la Plataforma de Nuevos Realizadores, la Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales, la Asociación de Montadores Audiovisuales de España... y un largo etcétera», subraya Benito. 

Cuando se entreguen los premios y se proyecten, como colofón, los cortometrajes ganadores el próximo 17 de noviembre será, augura Eder García, un día agridulce. «Daremos ese suspiro de: 'Por fin se acabó', pero también nos dará mucha pena de que acabe». En definitiva, son 15 días en los que el cine se vive en la capital de forma intensa y en primera persona. «La gente puede conocer a esos actores a los que sigue en Instagram», añade. Pero el Certamen de Cortometrajes Ciudad de Soria no acabará con el apagado de las luces en La Audiencia. Un nuevo ciclo comenzará justo después. La XXVII edición del Festival se pondrá ya en marcha para disfrute de los cinéfilos sorianos fieles a esta importante cita en el calendario.