Rusia atacó la ciudad de Járkov, en el noroeste de Ucrania, en represalia por el bombardeo ucraniano de este sábado contra la ciudad rusa de Bélgorod, que dejó al menos 24 muertos y más de un centenar de heridos, informó hoy el Ministerio de Defensa ruso.
"En respuesta a ese acto terrorista, las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa atacaron centros de toma de decisiones e instalaciones militares en la ciudad de Járkov", señaló el ministerio en un comunicado publicado en su canal de Telegram.
El mando militar ruso indicó que fue alcanzado el complejo hotelero Kharkiv Palace, donde fueron "liquidados representantes de inteligencia militar y las fuerzas armadas de Ucrania que participaron directamente en la planeación y ejecución del ataque terrorista contra Bélgorod".
"Allí se encontraban hasta 200 mercenarios extranjeros que planeaban emplear para lanzar incursiones terroristas en territorio ruso fronterizo con Ucrania", añade el comunicado.
Con el ataque a Bélgorod el ejército ucraniano habría respondido a los bombardeos masivos perpetrados el día anterior por las fuerzas rusas contra Kiev y otras ciudades de Ucrania, los mayores de toda la guerra, ya que Moscú utilizó unos 160 misiles y drones.
Los bombardeos masivos a Ucrania, que dejaron al menos 39 muertos y 160, y el ataque a Bélgorod suscitaron dos reuniones en 24 horas del Consejo de Seguridad de la ONU, la primera convocada por Kiev y la segunda, por Moscú.
En la reunión de ayer, en nombre de la ONU, el vicesecretario de Departamentos de Asuntos Políticos y de Paz, Khaled Kiari, condenó "todos los ataques en ciudades, pueblos y aldeas de Ucrania y la Federación Rusa", y advirtió sobre los "peligros de más escaladas y propagación de esta guerra".