Crecen las víctimas de sextorsión en Soria

EDS
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La Guardia Civil pide precaución y establece una serie de recomendaciones para evitar las diversas modalidades de ciberestafa

Crecen las víctimas de sextorsión en Soria

La Guardia Civil de Soria alerta del aumento significativo del número de víctimas afectadas por diversas modalidades de ciberestafa como las denominadas Sextorsión, Vishing y la suplantación de identidad en plataformas de juegos y apuestas online.

Para evitar este tipo de estafas, fuentes del Instituto Armado recomendaron no responder a correos electrónicos que soliciten datos personales, verificar que las webs visitadas sean auténticas, no acceder a portales bancarios desde dispositivos ajenos y evitar usar redes WI-FI públicas para transacciones sensibles. Además, si es necesario enviar el documento de identidad, se sugiere añadir una marca de agua o pixelar la foto para evitar su uso fraudulento.

En los casos de sextorsión, se trata de una forma de chantaje en el que el atacante amenaza a la víctima para que realice algún tipo de acción específica con el fin de no hacer públicas imágenes o vídeos con connotación que previamente le ha enviado. 

Como vishing se entiende la técnica utilizada por los ciberestafadores realizando llamadas haciéndose pasar por entidades bancarias, empresas de mensajería o un servicio para obtener información privada de las personas o para que instalen un programa malicioso en sus equipos informáticos o teléfonos móviles. 

Previamente, buscan en internet, información básica de las personas a las que se van a dirigir para conseguir que la llamada parezca legítima. Con tales excusas, solicitan a su víctima el código para firmar operaciones que va a recibir normalmente mediante SMS.

En tercer lugar, la suplantación de identidad en plataformas de juegos y apuestas online suele descubrirse cuando las víctimas intentan presentar su Declaración de la Renta y la Agencia Española de Administración Tributaria (AEAT) les informa de ganancias de juego que desconocían. El fraude comienza cuando los ciberdelincuentes obtienen el DNI y fotografías o vídeos de las víctimas. 

A través de SMS o correos electrónicos fraudulentos, los delincuentes se hacen pasar por entidades confiables y solicitan estos datos bajo pretextos de verificación. Posteriormente, usan las imágenes para registrarse en webs de juegos online.