"Varapalo ejemplarizante contra el urbanismo a la carta". De este modo ha calificado el portavoz de Podemos Soria, Alberto Sanz, la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, que obligará a demoler la 5ª planta del polémico edificio Pajaritos II por ser declarada ilegal. La formación morada relata que los hechos no acaecieron como asegura la actual oposición: "Marisa Muñoz destapó en comisión informativa y posteriormente en pleno municipal que este edificio incumplía las normativas urbanísticas al tener una planta de más, y lo advirtió al equipo de gobierno y al concejal de urbanismo para que encauzaran a la empresa constructora hacia la legalidad necesaria. Poco después se conocieron los informes del departamento de urbanismo paralizando la obra, que fueron ignorados por promotora y concejal. La mayoría absoluta del PSOE les permitía salirse por la tangente con una modificación del PGOU para formalizar esta ilegalidad".
Respecto del modo de proceder de la promotora, Sanz eleva varias preguntas: "Si existe un expediente en curso, ¿acaso no habrá que esperar a que este finalice antes de rematar la obra? Si existe una orden de derribo, ¿acaso se va a ignorar y dar entrada a las personas a las viviendas? ¿No será que la actuación del equipo de gobierno no se debe a la incompetencia sino a la connivencia y, en realidad, les habían prometido legalizarles este desaguisado?".
El partido del círculo lamenta el "impresentable mensaje" que lanza toda esta actuación a la ciudadanía y el "enorme perjuicio" que esta situación está causando a quienes adquirieron sus viviendas en este edificio. "Ilegalidades, chanchullos y pelotazos urbanísticos, todo al estilo del PSOE soriano y amparado en su mayoría absoluta, empleando normativas urbanísticas que aprobó el PP hace 5 legislaturas pero que ellos no han cambiado, siempre favoreciendo al gran promotor, nunca a la vivienda pública, nunca a la ciudadanía. Bipartidismo del ladrillo a la carta, señores. Esto es el socialismo para ellos. Pasen y vean".
Sanz concluye con unas palabras para el concejal de urbanismo de Soria, Luis Rey: "Lo de este caballero ya rebasa cualquier tipo de vergüenza ajena y de indignación. Cerro de los moros, macrovaquería de Noviercas, 5ª planta de Los Pajaritos… ¿Pero qué más hace falta para dimita este señor? Pues nada, ahí sigue, impertérrito, como si nada fuera con él, soberbio y sin admitir ni el más mínimo fallo, mirando siempre por los grandes capitales y la empresa privada mientras vuelve la espalda a la ciudadanía de a pie, de la que está completamente desconectado. Y todavía se dice de izquierdas. No es de extrañar, siendo escudero de Carlos Martínez que, como dijimos el otro día, no es sino un Mañueco de otro color, y aunque la mona se camufle de chupa de cuero, Mañueco se queda".