Virgilio Soria Montenegro nació hace 129 años (el 26 de junio de 1895, en Monóvar, Alicante). Llegó a Soria hace 117 años (en 1907, cumplidos los doce). Y murió hace 60 (en 1964, en nuestra ciudad del Duero). Situado queda el periodo histórico del protagonista de este exquisito libro: "Virgilio Soria Montenegro, Antología poética". Tal es el título. Editorial Lastura. Paloma Soria, nieta del poeta, abre esta espléndida y trabajada antología con estas palabras: "Mucho más que un libro. Es el volver a empezar de una historia enterrada para muchas almas. Y el empezar para otras. Y en lo que a mí respecta, mis queridos para siempre Juan Antonio y César me han entregado uno de los más preciados regalos de mi vida. Porque me han otorgado aquello que, aunque mío, nunca tuve. Hasta hoy". Y añade, para definirlo como un hombre del siglo XXI: "Moderno, divertido, atrevido, independiente". He ahí el personaje.

Pues, como digo, de su quehacer poético acaba de publicarse está magnífica selección lírica. Magnífica, por muchas razones: por su buen formato, por las orientadoras y situacionales introducciones de los dos responsables de la edición y por los contenidos y formas poéticas del autor. "Virgilio Soria Montenegro, Antología poética". Esta publicación completa y complementa otra anterior del mismo autor: "Ráfagas sorianas", de 2020, publicado por Libros singulares, Fundación Instituto Castellano y Leonés de la Lengua, con introducción, selección, notas y epílogo de Juan Antonio Gómez-Barrera, cuyo nombre, incomprensiblemente, no apareció en portada.

"Virgilio Soria Montenegro, Antología poética". Una antología es siempre una selección personal, realizada con criterios diversos. Y lo que uno elige otro puede desestimar. Pero cuando los que han puesto manos a la obra son personas con la solvencia intelectual, conocimiento trabajado y sensibilidad garantizada reconocidas, nadie dudará del resultado. En esta antología que comentamos, el resultado, sinceramente, está más que logrado. Ambos antólogos tienen ya su nombre grabado en el material más duradero: Juan Antonio Gómez Barrera y César Ibáñez París. Ambos se han repartido el trabajo con criterio, equilibrio y saber hacer. Todo un modelo. La editorial, Lastura, conoce el oficio y el antologado necesitaba esta obra, como todos los sorianos la esperaban. No veas, amable lector de EL DÍA DE SORIA, pizca de desmesura en mis palabras sino tasación objetiva. Un libro, como cualquier obra de arte o ciencia, nunca es fruto del azar. Lo es de muchas horas de trabajo. Y aquí, se nota. Sin duda, creo que al recordado amigo Jesús Bárez le habría alegrado tenerla en sus manos estos poéticos días de agosto.
"Virgilio Soria Montenegro, Antología poética". Gómez Barrera llegó a Virgilio Soria a través de la biografía que trabajó y pulió durante muchos meses sobre Blas Taracena, libro magno y monumental, aparecido en 2016 y editado por el Ayuntamiento soriano. Como magna es su obra "El Ateneo de Soria". Y de nuevo, en esta antología que acaba de salir, en una lúcida, clara y atinada introducción, titulada "Virgilio Soria, el telegrafista poeta", traza todo un cuadro de los aspectos fundamentales de la vida, relaciones sociales y personales, más la obra que construyó el poeta (literaria y periodística), en dieciocho densas páginas, documentadas al detalle como es lo común en las investigaciones y publicaciones de Juan Antonio. Este breve fragmento puede ser una síntesis suficiente, por ahora: "Mas su vocación, producto de su innata curiosidad y de su enorme deseo de saber, fue el periodismo, y su vicio, confeso y público, la poesía; y ambas tareas despertaron a la vez, en las aulas y pasillos del viejo Instituto".

Virgilio Soria, de 'Antología'

César Ibáñez París, por su parte, en el doble camino del conocimiento de la Literatura (ha dedicado su vida profesional a la enseñarla en las aulas de Soria) y de la creación y práctica de su obra creativa, fecunda, en libros reconocidos, tanto en poesía como novela, sitúa al lector en la tradición en la que bebió y escribió la poesía de Virgilio Soria y divide la antología que él ha seleccionado con cuidado exquisito en tres partes muy sutilmente diferenciadas y explicadas al detalle. La primera lleva por título "Carpeta de versos"; la segunda, "Antología"; y la tercera, "Retratos y semblanza" (cuyos personajes definen una Soria de entonces y el contexto cultural en el que se movía el autor: Mariano Granados, Clemente Sáenz, Epifanio Ridruejo, Gervasio Manrique, José Tudela, Juan Antonio Gaya Nuño o Teógenes Ortega, entre otros). En aquello que se denominó la "Tertulia de los cráneos" que, como sostenía Rodríguez Gaona, no eran más que las redes de contacto dadas de forma presencial y que ahora se hacen por Internet, en lo que se llama "redes sociales". El resumen de César sobre el personaje del libro lo materializan estas palabras: "Virgilio Soria, poeta de su gente, aunque no siempre de su tiempo, hombre bueno según los testimonios de quienes lo trataron, articulista lúcido, sale del olvido gracias a la edición de sus artículos ("Ráfagas sorianas") y al libro de poemas que el lector tiene entre sus manos": Virgilio Soria Montenegro, Antología poética.

Gómez Barrera e Ibáñez París han realizado un trabajo fino, preciso, ponderado, a la altura de su conocimiento, sensibilidad y compromiso, en esta antología que era necesaria en Soria. "Aquella en la que están nuestros recuerdos fijos./ Soria de nuestros padres, Soria de nuestros hijos./ En fin, nuestra Sorilla buena, pura y sencilla,/ Colgada junto al cielo, allá en la alta Castilla". Virgilio Soria Montenegro, Antología poética; editorial Lastura. Presentación en Expoesía, el miércoles día 7. Un libro que dejará huella.