El coordinador autonómico de la Unión de Pequeños Agricultores de Castilla y León (UCCL), Jesús Manuel González Palacín, acusó hoy a la consejera de Agricultura, María González Corral, de dejadez de funciones y de "dejar tirados" a los ganaderos de ovino de leche, que en las últimas semanas han visto como las industrias lácteas han rebajado de forma unilateral hasta 30 céntimos el precio de litro que pagan a los productores.

González Palacín, que esta mañana participó a las puertas de la planta de quesos Entrepinares de Santovenia de Pisuerga (Valladolid) en una concentración de ganaderos de ovino, reclamó a la consejera que tome cartas en el asunto y que, "como hicieron siempre el resto de consejeros, medie y presione a la industria para que se siente a negociar precios justos con el sector. Somos conscientes de que la Junta no puede negociar precios, pero sí puede presionar a una industria que recibe cuantiosas ayudas pública".

Al mismo tiempo, Palacín recalcó que en esta crisis UCCL quiere ser "una herramienta útil" y anunció que si la situación se enquista la próxima manifestación se celebrará el próximo martes, a las puerta de Feria de Valladolid, coincidiendo con la inauguración de 'Agraria'. Además, tampoco se descarta trasladar la protesta a la sede de la Consejería de Agricultura para recordar a la consejera "que haga su trabajo". "Mientras tengamos ganaderos detrás, desde la Unión de Campesinos vamos a seguir trabajando hasta que los ganaderos tengan garantizado un precio que cubra los costes de la producción".

Al mismo tiempo, denunció que las cinco industrias lácteas que recogen entre el 80 y el 85 por ciento de la leche de oveja que se produce en Castilla y León -Entrepinares, García Vaquero, Lactalis, Hijos de Salvador y Valle San Juan- están incumpliendo la Ley de Cadena Alimentaria y, sin "ninguna justificación", pactando los precios que ofertan a los ganaderos.

Además, Palacín advirtió que con estas prácticas "ilegales" la industria está contribuyendo al desmantelamiento de un sector muy envejecido, en el que el más del 60 por ciento de los ganaderos tienen más de 57 y en el que nueve de cada diez no tiene relevo generacional. En este sentido, indicó que la postura de la industria no es muy inteligente, dado que al contrario que la leche de vaca, que se puede importar, en el caso de la leche de oveja no hay alternativa.

Abuso

Por su parte, el responsable de ovino de UCCL, José Antonio Martínez, explicó que para cubrir los costes de producción el precio no debe bajar de 1,40 euros por litro, y lamentó la negativa de la industria a cualquier tipo de negociación y de abusar de su posición de fuerza. Además, advirtió que  con este panorama no puede haber un relevo generacional en un sector que en Castilla y León agrupa a unos 1.360 profesionales y que "trabaja a pérdidas", e indicó que en la reducción de ganaderos en la próxima década puede superar el 60 por ciento.

Martínez también recalcó que en esta ocasión el sector no está dispuesto a seguir trabajando a pérdidas y tener que recurrir a préstamos para alimentar el ganado. "La esclavitud se acabó hace muchos años", sentenció.

En la manifestación, bajo el lema 'Salvemos al ovino' también participó Laura, una joven leonesa que trabaja en una explotación junto a varios familiares, que también criticó que sea la propia industria la que quiere "aniquilar al sector y obligarle a trabajar a pérdidas, algo que es ilegal. No nos respeta", aseguró.