Internacionalización. Esta fue una de las palabras más repetidas por Moisés Israel cuando adquirió al CD Numancia. El máximo dirigente rojillo se marcaba como objetivo el dar visibilidad al club en el extranjero. Uno de sus proyectos ya ha desembarcado en Soria, es la academia internacional que se ubica en las instalaciones del Trilema.
Aunque es en este año cuando se ha materializado, ya la pasada temporada se puso la primera piedra del proyecto, «tuvimos cinco jugadores extranjeros que probaron con la cantera», recuerda Javier Modrego, director de la academia, «tras ver cómo se adaptaban, este año ya contamos con 13 jugadores que entrenan en el recién creado Numancia C y que a su vez conviven en las nuevas instalaciones».
Este proyecto tiene dos vertientes, «la primera crear esa marca internacional Numancia y la segunda conseguir nuevos jugadores que puedan dotar a la estructura de la cantera de nuevas alternativas». Un proceso a largo plazo que ya va dando sus frutos. Por un lado son varios los jugadores que ya entrenan en el Numancia B o en el División de Honor, por el otro la convivencia entre personas de diferentes culturas está siendo un éxito.
Captación. El proceso de selección de jugadores comenzaba el pasado verano, se realizaba por medio de agentes que el Numancia tiene por varias partes del mundo, «no solo buscamos buenos jugadores», matiza Modrego, «también hablamos con sus padres y con ellos para seleccionar un perfil que sea adecuado para el club».
Los jóvenes llegan de todos los continentes, «tenemos varios de EE.UU., Colombia, México, Corea, Indonesia y Nigeria». Todos con una forma diferente de ver el fútbol, «siempre tienen entre 18 y 23 años y buscamos que se adapten cuanto antes para ver si sus cualidades individuales pueden ser buenas para la entidad».
El siguiente paso no fue acoplarlos en la cantera, sino crear su propio equipo, el Numancia C, «es muy complicado que un jugador que viene del extranjero se integre en un conjunto de esta cantera, con esta fórmula hemos creado un paso intermedio porque conviven con jugadores juveniles que vienen del División de Honor y vamos consiguiendo que se integren en la estructura».
En esta mezcla se busca que jueguen al estilo que demanda el fútbol europeo y que incluso vayan entrando en entrenamientos de los clubes del Numancia que compiten a nivel nacional.
Futuro. En este proyecto cabe una pregunta, ¿esto se convertirá en una experiencia Erasmus o estos jugadores pueden asentarse en Soria? Solo el tiempo lo dirá, «todo dependerá de su nivel futbolístico y se les valorará como a cualquier otro».
Dependerá de varios factores, «primero son ellos los que deben hacerse al fútbol europeo, a las exigencias de esta cantera». Si eso se consigue, «podrán entrar en equipos potentes de la cantera, será allí donde los cuerpos técnicos valorarán hasta dónde pueden llegar».
Aunque puede parecer que con un ritmo más lento de adaptación no llegarán al nivel adecuado, «es algo que no tiene nada que ver, una vez que asimilen esos conceptos todo irá más rápido pero creemos que el hecho de convivir con jugadores en su misma situación les ayudará en el día a día, porque lo más importante es que se sientan cómodos».
Por el momento deben entrenar a las órdenes de Luis Molina en ese recién creado Numancia C. Modrego ya ha detectado dónde deben enfocarse, «la intensidad del fútbol español no tiene nada que ver a lo que están acostumbrados, estamos trabajando para que alcancen esa visión de este deporte lo antes posible». Para ello cuentan en la propia residencia con compañeros españoles, «algunos de ellos están en el filial y son la mejor guía posible para que aprendan lo que se les exige aquí».
Este equipo competirá en la liga provincial a partir del mes de enero,«es el momento de verles en el campo para saber hasta dónde pueden llegar pero creo que serán muy competitivos». Cuando la temporada termine se realizará un análisis de cada uno de ellos para saber quién puede seguir, «tenemos que ir poco a poco porque dependerá también de si ellos quieren seguir en el Numancia».
Además no se cierran la puerta a crear más plantillas de este tipo en otras edades, «pero sería más a largo plazo». Lo que van a intentar es «que clubes de otros países vengan aquí un par de semanas y conozcan cómo trabajamos». Es una de las patas de la internacionalización del Numancia, la más visible y que tiene a Soria como capital para su realización.