El complejo de las piscinas de verano de El Burgo de Osma ha abierto hoy sus puertas y permanecerá al servicio de los usuarios hasta entrado el mes de septiembre. Las piscinas burgenses inician así su vigésimo quinta temporada después de que el año 1999 estrenaran una profunda remodelación que añadió más vasos y más espacio al complejo.
El alcalde burgense, Antonio Pardo, recuerda que se trata de unas instalaciones modélicas en todos los aspectos, tanto en su dotación como en los servicios que ofrecen. Son las primeras piscinas públicas que abren sus puertas en la provincia y ya durante esta misma mañana ocho usuarios han disfrutado de ellas. Como es habitual durante todos los inviernos, este año desde el Ayuntamiento burgense se ha seguido invirtiendo en las instalaciones para que lleguen a la época estival en la mejor de las condiciones posible.
El complejo de las piscinas burgense se encuentra en una zona privilegiada y céntrica de la localidad entre la plaza de toros y el recientemente renovado edificio de los juzgados. A su entrada hay un completo parque infantil y un bar restaurante con salones interiores y dos terrazas que ha visto ampliado su espacio en los últimos años.
Con la renovación de hace 25 años, el complejo de las piscinas ganó espacio asumiendo como propio parque del parque y la arboleda que había antiguamente en la zona. El vaso más hondo dio lugar a tres entre los que se reparten los diferentes grupos de edad: hay una piscina redonda pequeña para los niños, una mediana y una más grande a las que se accede cómodamente por una zona con escalinata. La parte ajardinada es amplia con sombrillas, árboles y mesas y goza de un magnífico césped al que los empleados municipales ya llevan meses cuidando con esmero. Las instalaciones se completan con un módulo de servicios en el que está el acceso al complejo y unos completos vestuarios divididos por sexos. Taquilleros, personal de mantenimiento y socorristas con experiencia atienden a todos los usuarios de este servicio en el que no falta ni una pequeña biblioteca con ejemplares para todas las edades.
Las piscinas están abiertas en horario de once de la mañana a nueve de la noche y no terminarán temporada hasta el 8 de septiembre cuando les tome el relevo la piscina climatizada. En ellas también se ofrecerán curso de natación para niños las dos primeras semanas de agosto con un coste de 30 euros por inscripción.
El precio de la entrada a estas piscinas varía dependiendo de la edad de los usuarios y si están empadronados o no en la localidad. Los menores de cuatro años tienen acceso gratuito siempre y cuando estén acompañados de un adulto. Los mayores de 65 y menores de 14 pagarán por la entrada 1.50, 18 euros por el abono quincenal y 30 por el de temporada. En el caso de los que no estén empadronados, la entrada a ese grupo le costará 2 euros, el abono quincena 25 y la temporada completa 45. Los usuarios de entre 14 y 65 años que estén empadronados en El Burgo pagarán 2.50 por la entrada, 332 por el abono quincenal y 60 por el de temporada. Los no empadronados pagarán 3 euros por entrar, 40 por el bono quincenal y 85 por el abono de temporada completa.