El Unionistas de Salamanca es actualmente uno de los equipos de moda. A pesar de encontrarse en plena lucha por el descenso en Primera Federación, en la Copa del Rey acaparan todos los focos tras eliminar al Villarreal y tener que enfrentarse al FC Barcelona. Rubén Andrés nos cuenta ahora cómo va la temporada en el club en el que ejerce como director deportivo.
¿Cómo se lleva estar en el foco mediático con la Copa?
La verdad es que es salgo histórico para un club hecho por los socios como Unionistas que lleva solamente 10 años de vida y en esos 10 años de vida, desde la última categoría de todas, ha ido ascendiendo hasta estar en 1ª RFEF y ahora se va a enfrentar al Fútbol Club Barcelona.
A nivel económico habrá sido todo un alivio.
Sí porque nosotros al final no dejamos de ser, junto a Tarazona y Sestao, los equipos con menos presupuesto de la categoría. Cualquier ayuda siempre es buena y el tema de la Copa del Rey siempre te da un plus económico.
¿Como se dio el contacto con Unionistas para acabar siendo su director deportivo?
A la gente de Unionistas los conozco desde que nació el club. Unionistas siempre ha sido un equipo muy querido por mí, así que fue muy fácil. Me llamaron, y yo tenía ganas de trabajar con ello. Fue rápido.
¿Es complicado formar un equipo con poco presupuesto en Primera Federación?
Está claro que es complicado, pero con el paso de los años te vas dando cuenta que el dinero tampoco lo hace todo y que muchas veces es tener gente al lado que trabaje igual que tú y jugadores que vengan aquí con hambre.
Le llamaron además después del descenso en Soria.
Es bonito que valoren el trabajo, aunque mucha gente solo valora los resultados. La gente que está dentro del fútbol sabe cómo trabajamos. Con los jugadores hago lo mismo. Gracias a Dios no todo el mundo se basa solo en números.
En este caso ha pasado a un modelo de club diferente al del Numancia. ¿Es rentable?
Al 100%. Rentable es hacer las cosas bien, rentable es gastarte solo lo que tienes o incluso menos de lo que tienes para ahorrar en un futuro. En muchos casos hay inversores que llegan y no invierten (aclara que no es el caso del Numancia) y esto es de los socios es de las familias. Es un club de gente que muchos de ellos son voluntarios, vienen, trabajan y no cobran nada. Este modelo tenía que ser lo habitual o lo normal, gastar lo que tienes que gastar y no hacer cosas raras que lo pongan en peligro.
¿Fue complicado el verano tras salir del Numancia?
Sí, fueron semanas malas, no te voy a decir que fueron buenas. Salir de un sitio cuando prácticamente tenías hecho el objetivo que era la salvación y que se te vaya al traste por las últimas cinco jornadas, pues a nadie le gusta y menos a mí.
¿Sigue siendo la Primera Federación un pozo sin fondo?
Si se pagan cantidades como otros equipos que estamos viendo que pagan más allá de 200.000 euros a un jugador es imposible sobrevivir. Al final se juegan a una carta que es intentar ascender a la Segunda División.
¿Apuesta entonces por el control económico?
A favor siempre. Nos gusta jugar a todos con las cartas sobre la mesa y sin trampa ni cartón. Cuanto más equilibrio económico haya mejor será para el fútbol en general.
¿Volvería al Numancia si se diese la oportunidad?
Nunca se sabe, el fútbol da muchas vueltas. Tengo una gran relación con la gente que trabaja en el club. Por suerte, siempre he salido bien de los clubes en los que he estado. Por supuesto que no se pueden cerrar puertas.