La hostelería soriana se adapta a la nueva normalidad

S.Ledesma
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Después de tres años de flexibilización para apoyar al sector en la capital, los veladores surgidos en pandemia dirán adiós en enero; los hosteleros hablan de «trastorno» y urgen una «ordenanza moderna»

La hostelería soriana se adapta a la nueva normalidad

Los hosteleros de la capital -y sus clientes- deben adaptarse a otra nueva normalidad a partir del 1 de enero, cuando se vuelva a la ordenanza de terrazas y veladores que funcionaba en 2019 después de tres años de flexibilización para apoyar al sector de la hostelería de forma extraordinaria con el objetivo de aliviar los efectos de la pandemia, tal y como el Ayuntamiento de la capital acordó con ellos entonces. La medida, anunciada en la última Comisión de Hacienda y aprobada por el Pleno municipal con la mayoría socialista y en contra de los votos de PP y Vox, no ha sentado bien al sector, que insiste en la necesidad de una «nueva ordenanza», pues considera que «ha de renovarse la publicada en 2011, ya que se necesita una normativa moderna que recoja el cambio de hábitos de los consumidores tras la pandemia y el actual contexto turístico de la capital». 

«La pandemia nos ha enseñado que ha cambiado mucho todo: la forma de consumo, los hábitos, los gustos... Hay menos consumo en barra y se buscan espacios exteriores en los que estar menos encerrado y menos juntos», explica a este periódico el presidente de la Agrupación Soriana de Hostelería y Turismo (Asohtur), Pablo Cabezón. La vuelta a la situación previa afecta a cerca de 40 veladores de los más de 250 establecimientos de la capital dedicados al sector de la hostelería y la restauración. Aunque será en enero cuando entre en vigor, habrá un período de gracia extra, que se extenderá hasta el 4 de marzo, para efectuar la retirada de aquellos elementos instalados que tengan más dificultades.

mantenerlas. Para algunos de los regentes de los negocios afectados, la medida les va a suponer «un trastorno» porque, «aunque ya sabíamos que era algo provisional siempre hemos pedido que se pudieran mantener de alguna manera porque vemos que la gente viene y busca este tipo de terrazas». «Quitarlas ahora no tiene sentido cuando ya están instaladas» y «la gente se ha acostumbrado» a su uso, coinciden algunos. Al respecto, el presidente de Asohtur remarca las conversaciones que han mantenido «en los últimos dos años con el Ayuntamiento» para conseguir legislar de otra manera estas estructuras, aunque sin éxito. Agradece el apoyo hasta la fecha, pero recuerda al Consistorio que el fin de las medidas de flexibilización sin una ordenanza moderna devolvería al sector a 2011 (fecha de la publicación de la normativa en vigor) en un año en el que la situación no es la misma. Así, lamenta Cabezón, «serían dos años perdidos» de negociaciones. 

Y volver a esa otra nueva normalidad, la eliminación de una estructura ya integrada en el imaginario soriano, no es algo que tampoco estén deseando los asiduos. «Nos hemos acostumbrado a estas terrazas, que están mejor muchas veces que dos mesitas a la puerta para estar de pie. Hay más espacio, te puedes sentar tranquilamente y algunas están resguardadas... Además, qué problema hay si se deja instalada y el hostelero puede pagar un tipo de canon o lo que sea por este espacio», discurren tres clientes en una de las terrazas afectadas para indicar que tras la pandemia «algo hemos tenido que aprender: a estar menos apretados en los bares, a disfrutar un poco del exterior con tranquilidad ahora que los inviernos no son tan fríos». «Aunque en Soria,          -bromean-, esto no nos ha importado mucho nunca para alternar». 

medida excepcional. Fue en mayo de 2020 cuando se aprobaron las primeras condiciones de flexibilización de la normativa vigente municipal para la ocupación temporal de terrenos con mesas, sillas y otros elementos análogos con finalidad lucrativa denominadas 'terrazas de veladores'. En octubre de 2021 se resolvieron condiciones complementarias; en 2022 se volvieron a aprobar condiciones de flexibilización y un plazo extraordinario.

Atendiendo al proceso, el Consistorio soriano subraya que se ha tratado de una medida extraordinaria que, «además de dejar en suspenso la ordenanza para permitir estas terrazas de forma excepcional, también se acordó no cobrar la tasa durante dos años y bonificarla en un 50% el siguiente». Actualmente, según fuentes municipales, «se trabaja en colaboración con el sector para la redacción de una nueva ordenanza que regule este sector con aspectos como los veladores, las barras en periodos festivos, los nuevos espacios, la convivencia compartiendo espacios públicos...». En este sentido, el presidente de Asohtur asegura que serán «más exigentes con los ornatos», pues la modernización de las terrazas y veladores ha derivado en contar con más elementos: cortavientos, toldos y estufas, entre otros. Al tiempo, solicita «agilizar» su aprobación ya que la decisión de volver a la situación antes de la pandemia ya se ha tomado. 

Por su parte, el Grupo Popular en el Ayuntamiento de la capital lamenta el rechazo a su propuesta de esperar a la aprobación definitiva de la nueva ordenanza para terrazas y veladores para dar margen a los hosteleros hasta el próximo verano. La formación municipal considera que este proceso de actualización normativa «es esencial para asegurar la competitividad de Soria como destino turístico, promoviendo experiencias agradables y seguras para residentes y visitantes».

guía para los nuevos. La ciudad de Soria ha sido una de las últimas de toda la comunidad en retomar la situación previa al covid, según recalca el Consistorio de la capital. En Palencia, por ejemplo, han resistido hasta finales del pasado mes de septiembre. La situación, además, «hace que de esta forma los nuevos establecimientos abiertos tengan un documento que les sirva de guía para la solicitud o no de mesas altas o bajas en el exterior».